45 dias en Nepal 18-09-16 : Kathmandu - Pashupatinath

Kaixo, es mi segundo día en Kathmandu, dormir ? bueno ... bien, poquita luz para leer, ruidos ? muchos, eso
de los "dobles cristales" lo notas cuando no los tienes.
Hoy es domingo, no es dia de fiesta, es dia normal laborable.
Además, casualidad, a primera hora ha caído una tormenta y se ha ido la luz.
Pues nada, una ducha fria y a desayunar que ya son las 9.
Aunque siempre desayuno lo mismo, veo a una persona que sale a por las tostadas, otro que va a por un par de
huevos a la tienda ... me encanta ...
Salgo a las 10 a Pashupatinath, tengo ganas de volver a verlo después de tantos años, me acuerdo que me asombró.
Iré andando tranquilamente, aunque éso haga que trage un poco de humo de los coches, motos ... pero bueno ...
Me doy cuenta que si pregunto por donde se va tengo que decírselo a chavales de uniforme de escuela o mujeres y hombres
más bien vestidos, si no, ni idea de inglés.
Ésto es lo que vi.
Me encuentro un técnico en éso del Wifi o lo que sea, hay que ser muy técnico para entender semejante lio de cables.
En un momento que no hay coches, veo lo del otro lado de la calle.
Hay lugares por donde puedes ir por la acera.
El año 2016 es el 2073 de los nepalíes.
La glorietas son impresionantes para poder cruzar, lo mejor es no mirar y pasar, ya pararán o si no pegarte a uno del
pueblo y hacer lo mismo que él.
Ya estoy cerca, veo casas de todo tipo, tamaño, color.
Cruzo el río Bagmati, el cable suelto hay que esquivarlo por si acaso ...
Una peluquería y su correspondiente cola, hace años que no entro en una, me miran, no se si por guiri o que no tienen porvenir
conmigo. El peluquero, eso si, muy profesional.
Monos por todos los sitios.
Y llego a Pashupatinath, estñ igual que hace años, es impactante, hay una atmósfera que impresiona.
Cremaciones en los diferentes Ghats, están en silencio, no hay mucho ruido.
Me da la bienvenida.
Pashupatinath es uno de los más importantes templos hinduistas del mundo.
El dios Pashupati es el Señor de las Bestias.
El móvil del santón.
Cremaciones, desde el otro lado del rio puedes estar tranquilamente viéndo y pensando lo diferentes que somos.
Los cuerpos los traen un grupo de gente de telas blancas.
De vez en cuando viene algún olorcillo raro.
Antes de quemarlo lo lavan con las aguas del rio, sin quitarle las diferentes capas blancas de tela.
Una vez que sólo quedan las cenizas se tiran al río sagrado Bagmati que desemboca en el Ganges.
Y según el dinero que tengas pones más o menos madera, tipo y si no tienes suficiente dinero cómo la mayoría de
nepalíes ...
Es asombroso que en un momento como éste, estés por allí sin que nadie te moleste, pero sientes una especie de "cosa"
pensando que al final tiene que ser un momento duro para los familiares por muy hinduistas que sean.
Además al ir sólo notas más, se te pasa el tiempo sin querer.
Preparando ofrendas, los paraguas no es por la lluvia, es por el "calorcillo" que hace.
Aunque no se ven muchas vacas por la calle, de vez en cuando te encuentras algunas.
El pasear por este lugar atrae, meterme por rincones tranquilamente, sin molestar ... no encuentras la hora de irte.
A tope de gente.
Templitos y ofrendas. El terremoto no causó muchos daños en estos templos.
Hay un puentecito donde estuve un buen rato, simplemente mirando.
La gente se sienta en cualquier rincón para hacer ofrendas y hacer sonar las campanas, todo da una sensación de espiritualidad
terrible, el oir sonar campanas sin estridencias.
Algo separado hay una zona de templitos, rincones tranquilos, nadie, de vez en cuando alguien te sobresalta y casi
ni notas que pasa junto a ti.
Pasear por este lugar es sensacional, sin prisas ...
Templos donde oyes sólo algún ruido de los monos y alguna campanita.
En el interior de alguno de estos templos puede haber algún santón, el primero que me salió de repente, en esa tranquilidad,
menudo susto me dió ...
Las escaleras de bajada al Bagmati.
Pero no me apetecía bajar, quería seguir por aquí arriba.
Mi viejo amigo, Ganesh o Ganesha, dios induista de cuerpo humano y cabeza de elefante.
El dios de la buena suerte, si, a mi me la ha dado, es tener suerte estar aquí viendo y notando estos lugares.
Sigo deambulando, nadie, rara tranquilidad ...
Bonitos trabajos de madera.
A este templo el terremoto lo ha dañado.
Un enorme árbol resguarda los templos, la humedad, el suelo mojado de la tormenta de la noche le da una sensación distinta.
Y, de repente, veo una casita con una mujer que vende algún refresco en un cubo, hace calor, tengo sed, pero sólo tiene bebidas
azucaradas
y gaseosas, o sea, lo que más me apetece, pero es igual, le pido un refresco de mango porque es lo que hay y me siento al lado,
estupendo, encima no está frio, me da igual, espero a que me pregunte algo y, enseguida "where are you from ?" "The first time in Nepal
?".
Ah, me encanta, entre chapurreos de inglés, me dice que vive ahí con dos hijos pequeños y su madre, a los dos chavales ya se
les oye.
Un estupendo ratillo, me despido con el correspondiente "namaste". Me echa una sonrisa.
Y bajo al rio.
Por el camino, en algunos templos, hay santones que se hacen fotos con la gente.
Charlando amigablemente.
Mientras hay gente que prepara ofrendas, un hombre que, una vez preparada, baja al rio.
Y con cuidado la quiere depositar en las aguas.
Suavemente la empuja ...
Y allí se va, despacio ... hacia el Ganges ...
En seguida desaparece.
Me para una mujer para venderme una o las que sean "Mandalas", sonriendo, le digo que no, pero me responde que para la hija, no tengo, para "your
wife, wife",
me ha dicho que no compre nada ... le respondo medio riendo, pero su sonrisa ... "where are you from ? de Euskal Herria le respondo, empieza a
hablar en
castellano, que lleva montón de años vendiendo ... yo se que y ella también lo sabe que, al final,
le compraré algo, sólo por el buen rato que estoy pasando.
Y claro !!! le compro un par de mandalas, regateo a gusto y me voy con mis colgantes, cuándo los vea en casa me acordaré de la
sonrisa de esa mujer.
Sigo viendo gente distinta.
Distintos tipos de gentes.
Vuelvo a pasar en frente de las cremaciones.
Tienen un tiempo de cremación y al cabo del mismo, el cuerpo se echa al rio tal y cómo esté.
Pero supongo que con ese margen valdrá.
Las cúpulas de los templos.
Me tengo que ir, no se cuantas horas llevo aquí, pero siempre hay algo que te detiene, que te hace dar la vuelta ...
Al templo de Pashupatinath no pueden entrar extranjeros.
Una tibetana dándole vueltas al molinillo.
En los alrededores hay un sinfín de puestitos de todo tipo vendiéndote de todo.
Hasta hay cosas con los colores de Jamaica ...
Todo colores.
Montón de templos y su campanita.
Me toca volver a Kathmandu, tengo que irme sin mirar atrás porque si no, vuelvo a entrar.
Uno de los múltiples buses pero prefiero ir andando aunque la garganta note algo raro.
Las calles, andar y mirar. En algunos sitios, por donde tengo que cruzar ... mejor sin mirar, ya pararán, pienso.
Calor, botellita de agua fresca por el camino.
Un taller de motos, negocio seguro, con los millones que hay, viejas y todas recicladas, no se tira nada.
Es fantástico que con esos andamios las casas salgan rectas.
De todo y en dos metros cuadrados.
Tres munis, para qué ? ni idea ...
Hay muchos puestos con máquinas de coser.
Compro fruta, las manzanas son ricas, los plátanos también.
Por las aceras no se puede ir, hay que salir a la carretera pero hoy ha llovido ...
Una farmacia y, junto a ella, otra tienda con una mujer pasando la escoba, que moral, con la polvareda que hay cuando
pasan coches ...
Buah, chaval !!!
Llevo un largo rato andando sin darme cuenta y, de repente, me noto hecho polvo, cansado, sudado, empolvado ... pero
delante de mí tengo la solución: el precioso "Jardín de los Sueños".
Pero primero tengo que cruzar la calle, pues venga, si hasta ahora he tenido suerte ... me encomiendo a "Ganesh".
Es un parque tranquilo, parece mentira que esté junto a tanto caos circulatorio.
Fundado en 1920 y llamado "jardín de las seis estaciones".
Además, tiene un bar muy majo donde dan unas cervezas estupendas y frias. Hay unas mesas para sentarte tranquilamente.
Hasta puedes comer y hojear el "Kathmandu Post" que está en inglés.
Mala noticia, pone que un tigre se ha comido a una persona en el parque natural de Chitwan, pues espero que no tengan
más hambre porque voy a ir en unos días allí.
También te dan una ración de cacahuetes y más de una se acerca a ver si roba algo.
Después del tiempo que llevo andando, éste es un lugar de obligada parada.
Estoy un buen rato viendo pasar el tiempo, escribir algo, mandar algún mensaje para que luego me llamen "pesao".
Paseo por dentro del parque, sosiego.
Una gozada.
Mucha chavala y chaval viene, aquí se tiene que "ligar" bien.
Y salgo otra vez al bullicio, es impresionante la paz que se notaba en el Jardín.
Templos en medio de cualquier sitio.
Se nota que me he metido en Thamel ...
Un rickshaw, ya quedan pocos.
Muchas casas están todavía sujetas a cuenta del terremoto del 2015.
Elegancia nepalí.
Y contrastes.
No hay sitio ni para entrar. Esos taburetes ... pensar que los voy a usar para acabar hecho unos zorros.
Cualquier lugar es bueno para poner algo y hacer ofrendas.
Una tienda de cachivaques, en la tienda de al lado, una sastrería, venden ropa de boda, es la que lleva puesta el maniquí.
Vendiendo cacharritos de cerámica, en unos días pasaré por un pueblo donde hay montón de puestos de este tipo.
Paseando y paseando te encuentras con esta sorpresa ... pues menos mal ...
Una de las calles, ruido, bullicio, caos, me acuerdo del "Jardín de los sueños".
Vender, venderán, pero contaminadas desde luego ...
En cualquier placita ...templito.
Sorprendente andes por donde andes, inexplicable ...
Hasta el siguiente terremoto ...
Se nota diferente clase ...
Bonito lugar, callejuelas donde no hay nadie, medio perdido, hasta hay poco ruido ...
Sólo van cuatro, chico, chico, chica, chica ...
Rodeado de casas, cables, hace 35 años no había ésto, todo tan encajonado ...
Una preciosa portada de madera rodeada de ... no se ...
Bolsa de patatas, el dibujo de fuera era distinto pero por dentro todas iguales.
Este templo ha desaparecido y éso que era grande. Una pena.
Tienditas en los lugares más insospechados con las entradas más cómodas que he visto.
Campanita ? templito.
De la escuela, éstos crios tienen suerte.
Sigo andando sin rumbo fijo, paso entre calles solitarias, fuera de la zona turística, te das cuenta de cómo está mucha
gente.
Esta mujer lavando la ropa.
A clase las chavalas, el futuro de este país, uno de los más pobres del mundo.
Y las casas ... pues éso ...
Por aquí no hay ni un turista.
Rinconcitos.
Cruzo el Bagmati.
Hay varios puentes, los cruzaré alguna que otra vez.
Calles embarradas, cuando llueve tiene que ser imposible andar por ahi.
En cualquier lugar me encuentro con pequeñas tienditas.
Otra peluquería.
Encuentro un lugar donde dan unos cafés estupendos, me meto, ya se me ha olvidado el sabor del café.
También dan unas raciones de patatas con Ketchup muy ricas, por aquí hay unas patatas muy buenas.
Ahora toca descansar, ver la calle, gente, oir ...
Al rato vuelvo a caminar entre puestos de frutas o de cualquier cosa.
Me meto en placitas, en algunas hay pequeñas estupas que sirven para hacer propaganda de wisky.
Cualquier día se caerá.
Aquí había otro gran templo, pero el dichoso terremoto ...
En cualquier sitio hay velas y pequeños altares.
Mercaditos.
Aquí puedo comprar campanas.
Sin templo.
Con templo, pensar que también se pod&iaacute;a haber caído éste ...
Mezcla de balcones de madera, templos, altas casas, una amalgama de cosas.
No se qué templo habría aquí.
Cuándo veo cosas tan bonitas cómo ésta me da pena todo lo que se ha caído, me conformo pensando que hace muchos años
otro terremoto dejó en escombros la ciudad y se volvió a reconstruir.
Más contrastes, cuánto le habrá costado esa camiseta, muy poco, será copia pero ni me importa.
Que bonito.
El móvil que no falte.
Un pequeño comedor, en estos lugares se pueden comer "momos", champis ... aunque, a veces también comía otras cosas
también ricas.
Cuántos habrá de éstos.
Me meto en pequeño café-bar, no hay nadie, tranquilidad, con este calor y humedad me entrará bien una cervecita, pero es
"Sherpa",
comparando con otras es peor pero la tranquilidad del lugar lo merece.
Sigo metiéndome en plazas donde no hay nadie.
Algunas estupas están "forradas" porque se ha caido parte y hay que recuperarlas.
Dentro de plazas te encuentras con ésto, viejos templos rodeados de casas.
Ni un turista, no hay nadie, sólo casas apuntaladas junto a otras estrechas edificaciones, veré muchas de este tipo en
diferentes ciudades.
Sigo andando y andando, es un vicio.
Tio elegante.
Aquí hay de todo y de todas clases ...
Una carnicería, en cualquier sitio y pequeñita.
Las calles sin asfaltar, polvo a tope.
Aquí compro la tarjeta prepago del móvil, me sorprendo lo barato que es, lo que no me sorprende es lo que me roban
nuestras maravillosas compañias telefónicas.
A estas horas las tiendas se empiezan a iluminar.
Patukos, algunos compré, encargos que me mandan. A 4 euros el par, precio fijo.
Las últimas luces del día.
Haciendo risas con unos chavalitos.
Que bonito.
Copias de la estupa de Bodnath en pequeño.
Hay placitas con tiendas de exiliados tibetanos.
Sigo viendo cosas raras ... unos raros edificios de oficinas, se caerán ?.
Y marionetas, todavía tengo varias del primer viaje y tengo prohibido comprar más, ya me conocen ...
Y cuándo me doy cuenta ya son las 9 de la noche, se ve muy poco, sólo por las zonas donde hay tiendas abiertas, algunas, no
todas.
En el hotel no hay cortes, que bien. Aprovecho para resguardar las fotos, escribir, encargar el desayuno pero no se para qué,
tardarán lo de siempre.
Mañana toca ir a Hetauda, tengo que hacer una visita a un sitio muy especial.
De repente me encuentro hecho polvo, no se los kilómetros que me he metido, pero he visto tantas cosas que ni me he enterado.
Andando y metiéndote por calles y calles descubres cosas que ni te las esperas.
Ducha fria.
Me tiro en la cama, jode, que duros son los colchones de este pais ...
Pashupatinath ... sigue igual, asombroso, espiritualidad ... las sonrisas ...
Agur.