Kaixo, hoy es 13 de setiembre y vamos a hacer una travesía con grandes vistas, muy bonita y tiempo estupendo.
La cosa es que tenemos que ir en bus un largo rato pero viendo paisajes mosntañosos y según nos íbamos acercando al pueblito de Ltsen se notaba que nos íbamos metiendo en las montañas.
Desde Goris, curvas había todas las del mundo, pasamos altos collados y un pantano que nunca acababa y curvas, curvas ...
Desde el bus vi un monasterio, otro ... pensé.
Al fin llegamos a Ltsen, es un pueblito en medio del monte con poquitas casas, fuímos la distracción de los "jubilados" de la plaza.
Está a 1600 metros y en invierno tiene que hacer un frio y nieve bastante "elegante".
Tranquilidad total.
Estamos en la región de Siunik.
Lilit, la guia, estuvo hablando con este abuelico, entre otras cosas, nos dijo que un hijo se le había muerto en una de las múltiples guerras de este país.
Nada más empezar me encuentro con un panel de la travesía que vamos a hacer, una cómoda pateada de unos 16 km, muy bonita.
Cerca del pueblo nos cruzamos con un rebaño de ovejas, me recuerda a Euskal Herria.
En seguida una fuente, si no me acuerdo mal, es en recuerdo de los muertos de la zona en guerras.
El recorrido es muy agradable, al fondo los montes son de más 3.000 metros.
Vemos el pantano, es enorme, se ve desde cualquier sitio.
El camino es, a veces, una amplia pista por la que se anda muy cómodamente.
Zonas sombrias que se agradece porque hace calor.
Hay montón de árboles con este fruto, el guia con el que vamos, se las come, saben a manzanitas.
A veces me de la sensación que estoy en "mis" montes.
Encinas, hayedos ...
Y, al otro lado del barranco, zonas desérticas con tres miles al fondo, una gozada.
La cima más alta de la región de Siunik es el Kaputjukh de 3904 metros, el que quiera montes por aquí hay un montón y en invierno tiene que ser asombroso.
Es impresionante, zonas de enormes barrancos con bosques a un lado y al otro ni un árbol, zonas de cereales.
Seguiremos la ladera de la derecha.
Vamos encima de valles y profundos cañones.
Me encanta andar por estos lugares.
Zona donde los pueblitos están en pequeños oasis.
Una vez en el collado, a 2.200 metros, hay que hacer una paradita para reagruparnos y ver el paisaje, lugar escepcional.
También veo el senderito a la izquierda por el que vamos a seguir.
El guía, no hablaba inglés pero, al cabo de los dias, hicimos algunas risas.
Parece un paisaje lunar, al fondo vemos el pueblito de Harzhis. Luego lo veré más cerca.
De repente veo un rebaño, me recuerda a Aralar, me hace ilusión.
Las ovejas con el pastor y su burro, también había un perro que no dejó de ladrar hasta que nos dejó de ver. Buen perro.
La tierra labrada contrastaba con las montañítas a su alrededor, Harzhis ya lo veo más cerca.
Lugares solitarios, con un ambiente especial.
Grandes contrastes.
Seguimos el camino con senderitos de las ovejas hechas durante años.
Es una gozada andar por estos lugares, que a gusto.
Una pinpilinpauxa.
Poco a poco, tranquilamente.
Unas pelotikas ...
Después de unas horillas, con almuerzo por medio, vemos, entre los campos, el pueblo al que íbamos: Tatev.
Llego a ver el Monasterio que está a medio kilómetro.
En esta época está todo amarillo.
Todavía hay que andar un ratillo, me encantan los sitios por donde paso, aunque a veces parece que por estos lugares ya he andado ...
Por toda Armenia hay mucha costumbre de colocar colmenas, en otros lugares ya las había visto.
Ya nos vamos acercando a Tatev, qué pena, qué corto se me ha hecho.
Vemos un poco más adelante un chaval con un burro, vamos a hacer unas risas con él.
El guia habla con él, resulta que el chaval lleva en el burro el último kilómetro a la gente que está cansada.
Uno de nosotros que está un poco cansado, se monta, el problema que es más alto que el borrico y le llegan los pies al suelo.
Cuándo llega al pueblo, no me acuerdo si le cobra un euro. Nos comenta que se va otra vez al mismo sitio por si viene algún otro turista.
Se va corriendo porque dice que si su padre se entera se enfada ...
O sea, que el chaval y su borrico se están buscando la vida.
Entramos en el pueblo, Tatev, es sencillo aunque va mucho turista interno por el Monasterio y la Telecabina que hay.
Una pequeña ermita asoma entre las casas.
Una cuadrilla dándole a la charla.
Es un pueblo tranquilo.
Las calles son de tierra y está a quinientos metros del Monasterio al que nos dirijimos.
Tranquilamente lo atravesamos y nos cruzamos con alguna gente del lugar.
Nos miran, les miramos, un saludo y seguimos.
Una escuela y una fuente, viene bien para echar un trago.
Dos chicas que van a la escuela.
Cuándo vemos este coche nos asombramos de las viejillos que son, éste sin matrícula.
Una mujer paseando entre las calles, nos saludamos y seguimos cada uno nuestro camino.
Una bonita fuente con la figura de un khachkar o jachtkar.
Y después de cruzar el pueblo llegamos al impresionante Monasterio de Tatev.
Está en un risco, el lugar es impresionante. Y el verlo por primera vez después de haber llegado por el monte, es mucho mas bonito.
La torre azul esta restaurándose.
Rodeado de barrancos, es del S. IX sobre una plataforma de basalto.
Hay una carreterilla que sube un poco y se ve desde la zona alta.
Antes era una zona de culto pagano pero en su lugar se construyó éste con la cristianización de Armenia en el S. IV.
POsteriormente, en una época, fué un centro político y control de toda la zona.
Gozando de las vistas. Una gozada.
Sobre el barranco. Está a 1.600 metros de altitud, en invierno los 500 monjes que llegaron a estar pasarían frio aunque rezasen mucho.
Es espectácular, hay varias zonas que están en obras.
El terremoto de 1.931 causó graves daños.
A la entrada hay una serie de puestitos que venden muchas cosas, yo prohibido comprar ... con lo que tengo ya me vale ...
Hay varios burros para llevar a la gente. éstos ya están en el centro, el del chaval estaba a las afueras, buen "ojo" tenía para el negocio ...
La entrada al Monasterio.
Una de las puertas, se han ido borrando las inscripciones que tenía.
Parte del interior del templo.
Una turista armenia.
Más turistas, es un lugar al que va mucha gente.
Toda la familia.
Tiene tres iglesias, un salón, una biblioteca, un mausoleo y otros edificios auxiliares.
La primera iglesia, la de los Santos Pablo y Pedro, se hizo desde el 895 al 906.
En 1087 se construyó la Iglesia de Santa María y la de Santo Gregorio en 1295, ésta fué destruida por un terremoto.
El interior del templo de San Pablo y San Pedro. Estaba totalmente decorada con frescos pero han desaparecido.
E suelo fué restaurado por los soviéticos que lo trasformaron en una chapuza que no tenía que ver nada con el original.
Tiene una sonoridad asombrosa. Creo que todos los monasterios que hemos visitados tiene esta característica.
Había un monje bendiciendo a la gente que se acercaba.
Rezaba alguna oración con las manos sobre sus cabezas.
Haciendo cola.
Y les daba la cruz para besarla.
Una de las curiosidades del templo es una columna pendular, Gavazán.
Se construyó en el siglo X y ha sobrevivido a invasiones y terremotos.
Esta columna oscila y se ha restaurado, se contruyó en el año 904, una obra medieval, su forma de construcción consigue que oscile con los movimientos sísmicos o por el temblor de los caballos de algún ejército enemigo.
Después de su oscilación vuelve a su lugar. Tiene varias toneladas de peso.
La columna tembló mucho con el terremoto que, aunque dañó el Monasterio no consiguió que la columna cayese.
En su reconstrucción, se le colocó una serie de anillos lo que dificulta su total sensibilidad.
Se remodeló en los 80 pero lo hicieron en plan chapuza, ahora se está intentando que vuelve a su estado anterior.
En su base tenía una serie de pesos y contrapesos, al menor movimiento hacen que la columna oscila de una forma terrible.
Se tardó 5 o 6 años en construirla en el S. IX y no se sabe quién fué la persona que ideó este sistema de detección.
Está dedicada a la Santísima Trinidad.
En esta zona remota los pueblos de los alrededores son pobres, la agricultura no es muy boyante y gracias a este Monasterio se pretende darle más importancia a la zona.
Éste es el pueblo de Halidzor.
La capilla de san Pedro y san Pablo y la pequeña de san Gregorio a la derecha.
Otra de las particularidades de esta zona es la gran telecabina que evita bajar hasta el fondo del barranco y volverlo a subir al otro lado por una carretera que tiene más curvas que carretera. Lo construyó un grupo suizo.
Parece mentira que viendo tal Monasterio, a una corta distancia haya tal construcción, lo antiguo y lo moderno.
Desde dentro del cabina veo el Monasterio encima del barranco.
Esta telacabina es la más larga del mundo con casi 6 kilómetros, termina en el pueblo de Halidzor, desde ella veo la fortaleza del mismo nombre.
Grandes montañas y barrancos me rodean y también parte de la carretera, es realmente una maravilla de sitio.
Paso por encima de Halidzor, encima de la colina.
Una ortofoto de la salida, desde Ltsen cerca del pantano hasta Tatev, luego con el telesilla cruzas el barranco hasta Tandzapad.
El recorrido siguiendo la colina encima del barranco.
Al final, la telecabina cruza por el aire desde Tatev hasta Halidzor.
La linea amarilla del fondo es la frontera con Nagorno-Karabaj.
Desde Tatev, nos evitamos la carretera de subida y bajada hasta Tandzapad. La carretera no es broma.
Y el recorrido desde el lado opuesto.
Y ésto es todo por hoy, un dia precioso empezando por la bonita travesía y el impresionante monasterio. Otro dia de sospresas.
Nos dirijimos a Goris, allí sormiremos.
Agur.
Éste es el track de la salida: