Kaixo, otro día bajo bastante calor, más bien un calor poco aguantable pero estamos
de vacaciones y no nos vamos a quejar.
Hoy vamos a ver una de las ruinas más importante de los mayas: las de Tikal.
Pero antes tenemos que estar un rato en el bus viendo, de paso, algún mensaje por la carretera,
por ejemplo:
"si tomas, no manejes".
Comemos en un bar por el camino y llegamos a Tikal.
Entramos en las ruinas y de principio vemos una maqueta para hacernos una idea.
Normalmente se visita el 75 % de los excavado, que, a su vez, sólo es el 20 % de lo rescatado.
En la parte Central hay alrededor de 4000 estructuras.
Y una ave que nunca había visto al natural, un Tucan Pico de Quilla.
Hacia las ruinas pasamos por un sendero donde hay montones de tipos de árboles, uno de ellos es
la Ceiba.
Este árbol es sagrado para los mayas y puede llegar hasta los 50 metros de altura.
Otro árbol es el Chicozapote o árbol del chicle, puede llegar hasta los 40 metros, de
él los mayas extraían los primeros chicles que se usaron como higiene bucal.
Tycal, una de las ciudades más importantes de los mayas, tapada por la vegetación durante
9 siglos, se descubrió en 1848, y se abrió al público en 1955.
Está en el Petén, una de las selvas mas cerradas de Centroamérica.
Llegó a tener 100.000 habitantes y más de 500 kilómetros cuadrados en plena selva.
Su mayor explendor fué desde el 200 y 900 dC. hasta que se abandonó.
A partir del 900 y durante algunos años se usa cómo lugar de peregrinación hasta que
se abandona definitivamente.
Alrededor del 750 dC. el nucleo central llegó a cubrir aproximadamente 65 km cuadrados.
Es impresionante ver cómo van apareciendo estas edificaciones en medio de la selva, es cómo
si ésta te enseñase sus secretos poco a poco, por lo imponentes que son.
Pasamos por la Pirámide gemela del complejo "P". Hay montón de estelas.
Estas estelas son contemporáneas, a partir del año 2003 y, después de muchos años
de litigios de organizaciones indígenas,
se les concedió permiso para seguir haciendo sus ceremonias dentro de los lugares arqueológicos.
Vienen de muy lejos para seguir practicando sus ritos.
Subimos a ella desde donde vemos las estelas y la selva que parece que está intentando volver a comerse estas
edificaciones.
Nuestro guía se llama Nixon, nos cuenta montón de cosas todas a cada cual más interesante.
Una de las muchas estelas de la Acrópolis Norte de enorme tamaño.
Esta estela y altar cuentan fechas de celebraciones, nombres de gobernantes, etc.
Vemos unas estelas y altares del complejo "R".
Al restaurar se dieron cuenta de que si quitaban los arboles de alrededor y el musgo, las piedras se desgastaban antes por
la erosion y la falta de humedad que daban los árboles.
Todavía hay montón de templos semienterrados.
En esa estela también se conmemoran diferentes efemérides, nombres y fechas a base de glifos.
Y unos glifos medio borrados por el paso del tiempo.
Un mono araña. Había montones pero poco se veían, más bien se oían.
Llegamos a otro templo impresionante, el "V", verlo entre los árboles, cuando hasta hace poco estaba comido
por ellos te asombra. Tiene 57 metros de altura y es el segundo más alto después del templo IV.
Se construyó alrededor del 700 dC. y parece que es un enterramiento de un rey maya. Hasta hace poco no
era más que una colina.
Seguimos andando hasta llegar a la zona de la Acrópolis Central.
Tiene 600 metros de largo, 150 de ancho y 240 habitaciones.
Una de las habitaciones.
Se cree que esta zona era para la gente que visitaba la ciudad y para la que la administraba.
Se construía de forma que el aire pasase entre ellas.
Las camas eran estáticas y de piedra con un algodón encima.
El ángulo del techo, de 60 grados, era perfecto para distribuir el peso de los otros edificios, ya que
entre ellos se soportaban para,a su vez, aguantar a los más altos.
Tenia agujeros a ambos lados de las paredes que se usaban para poner soportes de madera.
La piedra de arriba, llamada "Llave", ancha y gruesa para soportar el peso.
La madera que se usaba era del árbol "Chicozapote" o árbol del chicle.
La Acrópolis central.
El Templo V intenta sobrevivir por encima de los árboles.
La impresionante Plaza Central entre el Templo II y el Templo I o del Jaguar, desde la Acrópolis Central, enfrente
está la Acrópolis Norte.
Pulsar en la foto para verla en grande.
El Templo II o Templo de Las Máscaras. Con 38 metros se construyó sobre el 700.
En su cima tenía tres cámaras seguidas separadas por dinteles de madera.
Mira a Oriente, está enfrente del Templo I que mira a Occidente.
Casas de la Acrópolis de la Gran Plaza.
La Acrópolis Norte y el Templo I en la Plaza central.
El Templo II.
En la zona oscura de arriba, en la parte izquierda, se llega a distinguir un circulo que era cómo la orejera derecha de
la máscara enorme que cubría toda la parte de arriba oscura.
En la zona de abajo se distinguen las tres máscaras más pequeñas.
También servía de referencia astronómica desde la puerta superior.
El templo I o del Gran Jaguar.
Se construyó para enterrar al Rey Jasaw Chan K’awil y tiene 47 metros de alto.
Una máscara.
El templo II.
Templo I o del Gran Jaguar. Desde la Acrópolis Norte. Al fondo la Central.
La Norte tiene 16 templos en total.
El Templo II desde la Acrópolis Norte.
Templo I desde la Acrópolis Norte.
El Templo I o del Gran Jaguar y la Acrópolis Norte.
Pulsa en la foto para verla en grande.
Todo ésto te lo tienes que imaginar coloreado, entre el verde de la selva. Tenía que ser impresionante.
En esta zona hay árboles de resina de color rojo.
Al oeste de Coban se ha encontrado resina de color azul.
Los mayas tenian resinas de estos colores más blanca y amarilla con las que hacía mezclas.
Cuando se han hecho excavaciones en la parte baja de los templos y se ve el edificio anterior también se ve la
pintura.
En el templo I se han encontrado evidencias de 9 colores.
El estuco no sólo se usaba para cubrir templos y pintar sobre ellos, también para esculpir formas en relieve por
la facilidad de su consistencia, lograda gracias a las resinas.
Un buitre nos vigila desde el alto del monumento.
Aquí se ven los restos de las máscaras. tenían una nariz muy grande.
El tres de Mayo y el 14 de Agosto, a las doce del mediodia no hay sombra porque el sol está en el punto mas alto.
Por ello, las máscaras no hacían sombra, miraban hacia abajo, pero el 22 y 23 de diciembre, llegando al
solsticio, a las 12 del dia, el sol está al sur y las sombras al norte, por lo que las narices de las máscaras hacían una sombra muy larga y así calculaban el ciclo solar.
También calculaban el ciclo lunar, muy importante para los mayas. En el cuarto creciente, hasta 4 dias después
de la luna llena hacían el cultivo de vegetales, tala de árboles, etc.
Si los techos de palma se cortan en Cuarto Creciente hasta unos dos dias a partir de luna llena, al estar llenos de savia,
las palmas pueden durar hasta 39 años.
Pero si se cortan en Cuarto Menguante, en luna nueva, las palmas no tiene savia y sólo duran de 7 a 10 años.
Aquí se ven más máscaras en lo alto del templo II.
Estaban todas forradas de estuco coloreado de varias tonalidades.
El estuco es yeso mezclado con resinas naturales y fibras. Se calentaban bloques de caliza a base de hornos de carbón.
La cal viva se obtenía por el mismo proceso y era utilizada para luego hidratarse y así unir bloques de
piedra.
Las raices de los árboles parcen que quieren volver a comerse las ruinas.
El Templo V de 57 metros de altura y en la zona alta oscura había tres grandes máscaras desaparecidas.
Del 1996 al 2003 se hace la restauración de la puerta hacia abajo durante 13 o 14 años.
Se encontró un esqueleto de una mujer con incrustaciones de pirita en sus dientes y unos incensarios de cerámica
fechados en el 650 dC.
Para encontrar estos restos se excavó un tunel para comprobar la estructura interna y estucos coloreados.
Aparecieron ofrendas en épocas especiales del año en su periodo de construcción.
El 23 de diciembre, solsticio de invierno, el sol está exactamente encima de la cresta y su sombra se marcaba sobre las
gradas.
El solsticio lo marcan dos templos, uno de ellos es el V.
Por la mañana en la puerta del templo III y al mediodia en la cima del templo V.
Los templos, una vez al descubierto, se han forrado para resguardarlos.
Se ve la diferencia entre la parte de las gradas, restauradas, y la parte superior.
Antes eran así. éste templo tenía, además, las esquinas redondeadas.
Una de las zonas del templo sin desenterrar.
Llegamos a la Plaza de los 7 templos que están sobre otros edificios anteriores.
Había un triple juego de pelota con zona de entrenamiento y con evidencias de que se quemaba incienso.
Se jugaba de varias formas según la zona.
Existían también gradas pero no se ven.
Unos monos araña aparecen y por unos momentos nos distraen de las ruinas.
Además el ruido de la chicharra es ensordecedor.
El templo III o del Gran Sacerdote. o del Sacerdote Jaguar. La última de las grandes pirámides de Tikal.
Tiene 55 metros y tenia un dintel de techo bellamente esculpido pero muy dañado dedicado al rey sol.
El santuario del templo tiene dos cámaras.
Unas Chachalacas.
Y un Pájaro Carpintero.
La base de una Ceiba.
Pasamos por el Complejo Astronómico o Grupo "E". Se descubrió en 1924 y se restaura hasta 1980.
En otro lugar y 60 años antes ya se había descubierto otra plaza idéntica a ésta y ahora hay
más de 2000 (dos mil) plazas idénticas a ésta. éste tiene 4 estructuras y es de 6 kilómetros cuadrados.
Se hicieron en cientos de años por gente diferente pero están alineadas al solsticio.
Las gradas estaban en los 4 puntos cardinales.Tenía varias máscaras alrededor de la pirámide.
Un gran insecto.
ésta es una piedra de esquina. este bloque tiene 90 cm. de largo y 35 cm de ancho. Un 10 % va hacia fuera y el resto
hacia adentro, complementa la pared, hace de base para la parte superior y, en caso de movimiento, la estructura no se abre
hacia afuera, sino que las 4 esquinas hacen balanza hacia adentro. Se han encontrado bloques de dos metros cuadrados que siempre
van en las esquinas para servir de balanza.
Este icono lo usaban los Toltecas en el centro de Méjico para hacer una referencia a la lluvia, llamados "los Ojos" por
los arqueólogos, en la ciudad de Guatemala también aparece esta iconografía.
Se cree que para el 700 u 800 aC. la ruta de comercio era Teotihuacan, a mil kilómetros de aquí, Tikal y
Guatemala Ciudad que formaban un triángulo que era de comercio.
Templo Talud-Tablero.
De repente aparecen una cuadrilla de varios Coaties o Pizotes de distinto tamaño. Ni se asustaban pero iban y
venían sin darte cuenta.
El Templo IV.
La base tiene unos 200 metros de largo, construido el 740 dC. hace dos años se hizo una investigación y se
descubrió otro edificio debajo de él.
Marca cuando el sol está en el punto más alto y pasa por toda la parte de arriba del templo.
Para ver ésto sólo hay que subir por unas escaleras preparadas e imaginarte por unos momentos cómo sería
ésto cuando estaba en su apogeo, con sus colores ...
Pulsa en la foto para verlo en grande.
Una vez subidos a las gradas del Templo IV, la vista es increible, hasta donde alcanza es selva y, de vez en cuando aparecen
como colmillos los templos que están descubiertos. Estoy a 66 metros de altura.
Los templos I y, delante, el II.
Los templos I, II y III.
Los templos I y II.
El templo III.
El templo V y, delante, la loma que tapa la Acrópolis Norte.
Después de estar un buen rato arriba, seguimos el recorrido y vemos unas restauraciones, todavía medio comidas
por la vegetación.
Cerca está el complejo del "Mundo Perdido", con 38 estructuras y una gran pirámide de 32 m. de altura.
Gracias a los túneles que hicieron los arqueólogos en su interior, se han descubierto 4 pirámides
parecidas bajo la parte externa.
La más antigua es del 700 aC.
Unas raices se comen a otras.
Los caminos los han limpiado.
Pero, aunque no parezca, el suelo se mueve.
Esta mujer está echando una siestita, con el calor que hace y los sonidos que hay no me extraña.
Mientras, esta mujer hace unos preciosos telares.
Es una gozada ver cómo los hacen.
Nos despedimos de nuestro guia, Nixon, he aprendido monton de cosas y me lo he pasado estupendamente.
No había visto jaguares pero sabía que ellos si me habían visto, seguro, la selva de Peten es la de mayor
densidad de estos animales por kilómetro cuadrado.
Volvemos a Flores y por el camino veo cómo nos vamos comiendo la selva poco a poco.
Según nos ha comentado Nixon se tala bosque para ganado y exportarlo, sobre todo a Mejico.
En 1960 llovía unos 3000 mm, ahora unos 1500 mm.
Hace 50 años esta región de 94.000 metros cuadrados el 94 % era selva, ahora sólo hay 15.000
kilómetros cuadrados pero ya está protegida. Es igual, nos la cepillaremos por otro lado.
Hay mucha deforestación, sobre todo por las multinacionales, y llueve menos.
Comemos algo por el camino y hace un calor que es un poco infernal.
Por hablar, llueve bastante por el camino.
Y llegamos a Flores ya anocheciendo.
Unas vueltitas por el pueblo y el lago.
Está precioso a estas horas.
En la plazita del pueblo, junto a la iglesia, me acuerdo del puestito de ayer, tiene cervecitas frescas y seguro que puedo
hablar con alguien. Allí voy.
Aunque ahora las casitas tengan un solo color, antiguamente estaba muy coloreadas.
Y vuelvo a ver este precioso lugar por última vez, mañana me voy.
Un pick up.
Las barquitas vuelven de llevar gente de un sitio a otro.
Una impresionante cantidad de golondrinas vuelven a pasar la noche en el pueblo, hay miles ...
El lago de Peten Itza con su anochecer se despiden de mi.
Y ésto es todo por hoy.
Pienso en lo que he visto, es impresionante imaginar todas estas ruinas con gente, bullicio, montón de colores ...
y sabiendo que hay miles de edificios que no se han encontrado y que están bajo las copas de los árboles.
Mañana iremos a otro lugar distinto, en el Caribe.
Agur.