
Kaixo, 30 de octubre, ayer acabamos el trecking de Gokyo y volvemos a Kathmandu.
Ahora estaremos un par de días "turisteando" por los alrededores de la capital antes de volver a Pokhara para hacer otro trecking.
Hoy iremos a Patan, a 8 km. de Kathmandu y Bhaktapur, lugares ya conocidos pero siempre distintos, una gozada andar por sus calles y plazas con unos magníficos templos y mucho ambientillo.
Por aquí deambulamos.
En Patan vive una de las diosas vivientes "Kumari".
Kumari Deví es como se llama a una persona considerada "Diosa viviente" en Nepal. En Sánscrito "Kumari" es "inocente, virgen ..." y en nepalí "Kumari" es "niña virgen".
No es la primera vez que entro en este templo, pero sigue dando la misma impresión que la primera vez. El interior es oscuro y hay que subir unas escaleras para entrar en la habitación de la chavala.
Verla allí sentada en ese trono, impresiona.
No se puede sacar fotos, a lo mejor con el móvil, con la cámara no, tampoco me importa, empezarle a hacer fotos como su fuera un ... no se ...
Se le notaba solemnidad y "algo" especial, también la habitación donde estaba ayudaba a ello.
Es una niña de la casta "Shakia", que pertenece a la comunidad Newari de Nepal.
La veneran los hinduistas y budistas nepalíes, pero no budistas tibetanos.
Creen que es la reencarnación de la diosa Taleju hasta que la Kumari correspondiente menstrua, a partir de aquí los nepalíes creen que la diosa sale de su cuerpo.
Luego se elige otra niña y así sucesivamente. Según menstruen más o menos antes, más o menos años estarán ahí.
También pueden ser destronadas por cualquier rasguño que se hagan accidentalmente y pierdan sangre.
Las familias correspondientes se enorgullecen de tener una Kumari.
Nadie les puede tocar y no pueden tocar el suelo.
En el terremoto del 2015 todos los edificios de la Durbar Square de Kathmandu se desplomaron menos el de la Kumari.
Cuando comenzó el seísmo muchos nepaleses imploraron a Kumari para que los protegiese.
Sólo hay 10 Kumaris en Nepal, nueve de ellas en el valle de Kathmandu.
Salimos y seguimos callejeando por la cuidad.
Hay templos por todos lados.
Grandes trabajos en piedra.
Y tallas de madera sosteniendo los tejados.
Qué raro, poca gente.
Pintores de Tankas o Thangkas, un tapiz tibetano, son increíbles, los dibujos siguen un orden determinado sobre la vida de Bhuda, temas religiosos ...
Entramos en otro templo precioso, el Hiranya Varna Mahavira o el Templo de Oro, del siglo XII, es budista.
La entrada tiene dos figuras de madera que sostiene el techo, son las reencarnaciones de Vishnu en Shiva.
A cada lado hay un león y una leona.
Mahakala, deidad de budistas e hinduistas, es una de las ocho deidades del panteón budista.
Una vez pasado al patio hay otro templo más pequeño, el templo de Ratna Chaitya.
Detrás está el templo principal de cuatro pisos.
La gente pasea por el interior, está totalmente decorado.
Con montones de figuras de metal, de hierro, hay de todo y todo tiene su significado.
En cada esquina hay un "leogrifo".
Hay dos elefantes dorados sobre dos figuras de tortugas.
El campanario del templo, se ven tres figuras, las Tres Joyas, que son el Buda, Dharma y Sangha.
Arriba veo figuras de cobras.
Las largas tiras de metal, que también se ven en otros templos, parece que son para que los dioses bajen por ellas cuando se reza.
Hay un grupo de turistas del país.
Las chavalitas venden velas para hacer ofrendas.
El santuario principal del Buda Shakyamuni, conocido como Kwabaju.
Figuras de Buda con varios brazos.
Al rato salimos del templo y nos vamos al centro de Patan, a la Durbar Square.
Nada más entrar se ve el impresionante templo de Krishna y la figura de Garuda.
Garuda es una deidad con cuerpo humano dorado con un pico de águila y alas rojas.
Es tanto budista como hinduista.
Unas tallas de madera de gran trabajo, hay muchas de tema erótico.
El templo Vishwanath que está delante del de Krishna.
Un guiri deambulando ...
Haciendo compras, todavía había gente que llevaba la mascarilla pero muy poca.
La Campana de Taleju y otro templo de Krishna, es octogonal y una maravilla.
La campana pesa más de 700 kilos.
Es una maravilla el trabajo de la piedra.
Todavía se ve el efecto del terremoto del 2015 en los templos, muchos ya los han restaurado mientras que otros han desaparecido.
Las abueletes se dedican a leer las noticias.
Junto a la plaza hay unas escalerillas desde donde se ve el ambiente, me he pasado montón de horas en esta zona otros años.
Collares de flores para las ofrendas.
Estas tallas de madera saliendo de los ladrillos me encantan.
Hay un continuo pase de gente, una gozada.
Toda elegancia.
Una preciosa cúpula.
Entre los tejados destaca la imagen del rey Yoga Narendra Malla adorando a la diosa Taleju que se reencarna en la "Kumari".
Conversando tranquilamente.
El técnico de las líneas de teléfono, televisión, wifi ... escalofriante ...
Elegancia total.
Después de estar un buen rato en Patan vamos a otra ciudad encantadora, Bhaktapur, también llamada Bhadgaon.
Es uno de los lugares que más me gustan.
En muchas plazas hay gente venteando el arroz.
Y pasan horas y horas ...
Y los hombres a la sombra jugando a cartas.
En cualquier placita de algún templo.
Y los jubilados arreglando el mundo.
En Bhaktapur los más mayores no hablan nepalí sino newari al ser de esta etnia.
Como en Patan aquí también hay una estatua pero de otro rey: Bhupatindra Malla.
También de la dinastía Malla.
Una cuadrilla de chavales.
En cualquier esquina hay grupos de gente mayor, hay que pasar la mañana como sea, en este país no hay pasta para los jubilados.
El mismo guiri ...
Una imagen que sale por de una de las ventanas, me gusta más el trabajo de los carpinteros.
Un crio que me ha "cazado", pues yo también a él.
Ver pasar el tiempo sentad o mirando el móvil ... generaciones ...
Según voy paseando veo diferentes grupos de mujeres, todas con bonitos vestidos de muchos colores.
Y entramos en la Durbar Square, es una preciosidad con sus templos y pagodas.
Varios de estos edificios quedaron totalmente destrozados por el terremoto pero ya están reconstruidos.
Otra imagen de la deidad Garuda, la de las alas rojas, aunque en este caso no estén coloreadas, frente al templo de la deidad Dattatreya, del S. XV.
Dattatreya es una personificación de la Trimurti de Brahma, Vishnu y Shiva.
Hay otra Trimurti muy bonita en Kathmandu, junto al templo de los monos.
El carpintero, visto las ventanas que hay es impresionante el trabajo que hacen y cualquier lugar es bueno para trabajar.
Impresionantes trabajos.
Sin querer salimos de la plaza, me lo paso estupendamente viendo cosas.
Pasamos por delante de tiendas donde están haciendo dibujos de Tankas.
Este hombre por lo menos está sentado.
Pequeños puestos en donde venden de todo.
El pescatero, algo venderá.
Qué tal vecina? Bien, aquí, descansando ...
Los maniquíes tampoco son broma, merece la pena venir aquí para verlos ...
Tienditas, miles de tienditas, una gozada pasear por estas callejuelas.
La última moda en vestidos ...
Cualquier lugar es bueno para intentar vender.
Hay mucha gente con máquinas de coser en plena calle y, a lo mejor, te lo hacen en el mismo momento ...
Profesionalidad a tope, cualquier cosa que le pides te la hacen, seguro.
Qué hago .. dejo al nieto o atiendo a la gente ...
Un txiringito con comida para llevar.
Hay muchos lugares que venden cosas de arcilla.
Es increíble todo lo que se puede vender en espacios tan minúsculos.
Por lo menos un termo si vende.
Curioseando las botas, de piel de vaca y tienen un aspecto muy bueno.
La pescadería, los pescaditos fritos que comimos en Pokhara estaban estupendos y eran de la misma "pinta".
Lentejas, alubias, frutas, coliflores y mucha paciencia ...
Aquí había de todo.
Junto a un viejo templo.
En la plaza Thaumadi está una de las dos pagodas de cinco pisos del valle de Kathmandu, la otra está en Patan.
Es la pagoda de Nyatapola que significa "cinco pisos".
En el terremoto de 1934 sólo se cayó en último piso y en el de 2015 aguantó aunque hasta el año 2020 se hicieron algunas renovaciones para dejarlo estable.
Se nota que hay poco extranjero porque sino esta plaza estaría llena.
La gran escalera está flanqueada por cinco parejas de animales y dioses, se dice que cada pareja por cada nivel aumenta su poder por diez.
Las dos de arriba, Simhini y Vyangini, tienen diez mil veces más de poder que las del nivel inferior y así sucesivamente.
Las dos figuras inferiores son las de Jai Mal y Patta, los luchadores más famosos de Bhaktapur.
El trabajo de cantería tiene que ser muy importante en este país.
Desde luego, trabajo de cantero no falta.
El templo Bhairav Nath, está en una plaza junto a la Durbar.
Dedicado al dios Bhairav que es una reencarnación de Shiva.
Se construyó a mediados del S. XVII.
Vendiendo verduritas.
Cosas de alfareros hay en los lugares más insospechados.
El templo de Badrinath, entrando a la plaza.
Es del S. XVIII, en el terremoto de 1934 se destruyó y se rehízo, en el del 2015 volvió a colapsar y ha vuelto a ser reconstruido en su estilo original, el de Sikhara.
Callejeando siempre hay alguna cosilla para ver.
En la misma plaza, huchas, tortugas, búhos mezclados con granos de arroz para ventear.
Son lugares que me encantan.
Dibujando Mantras y Tankas.
Hacen verdaderas maravillas, dibujos muy bonitos y miniaturas.
Me acuerdo de mi espalda y mis rodillas ...
El nieto que se escapa de la tienda.
Volvemos a la plaza.
La entrada al templo Doleswwar Mahadev y su puerta dorada (Golden Gate) o Sun Dhoka. El dintel tiene montón de figurillas hindúes, es magnífico.
A continuación, de los siglos XVI y XVII, el palacio de las 55 ventanas.
El templo de Vatsala Durga, la estatua del rey: Bhupatindra Malla, de la dinastía Malla.
Hay que posar para la foto delante del Palacio de las 55 Ventanas.
Sólo una ventana tenía cristal, debido a su alto coste pero desapareció en algún terremoto.
Todo el conjunto se fundó en el S. XII aunque la fachada de las ventanas es de finales del S. XVII.
En la década de los 2000 gran parte de él se desmontó ladrillo a ladrillo y se reconstruyó con los materiales originales reparando muchos daños por humedad, lluvias, terremotos ...
Esto ayudó a que en el terremoto del 2015 no sufriese demasiados daños.
Menos mal porque es una maravilla de trabajo.
Dentro del palacio hay unos elegantes rincones y un templo hindú pero sólo accesible a los de esta religión.
El estanque con la cobra que lo rodea.
Otra preciosidad, el templo de Siddhi Lakshmi del S. XVII.
La diosa Lakshmi es protectora de espíritus malignos, hay mucha gente que lleva este nombre y posa en sus escaleras.
En el terremoto del 2015 a punto estuvo de desaparecer, desde luego, en el año 2016 casi ni se veía, todo reducido a piedras por el suelo.
Hay que guardar fila para sacarse una foto.
Tiene 10 esculturas de animales, humanos ...
El crío encima de un rinoceronte como en un "tío vivo".
El elegante templo de Vatsala Durga o Vatsala Devi, en honor a la diosa Durga.
Se destruyó totalmente en el terremoto del 2015 y fue reconstruido con sumo cuidado hasta que se completó en el 2020.
En la cúpula hay cuatro figuras de leones que sobresalen y a cada lado, en el suelo, tiene un par de grandes campanas.
El templo de Vatsala Durga está junto a la columna con la estatua de metal del rey Bhupatindra Malla, uno de los más populares reyes de la dinastía Malla del reino de Bhaktapur.
Está anocheciendo y el templo de Mahadeva o Kedarnath dedicado a Shiva se enrojece.
Este tipo de templos son del estilo Sikhara.
Tiene cuatro pórticos hacia los puntos cardinales.
Es todo de ladrillo rojo menos las columnas que sujetan los pórticos que son de madera.
Es muy bonito.
Y algunos templos de la plaza, es un lugar que nunca te cansas de verlo.
El terremoto del 2015 destruyó algunos que están desaparecidos y todavía hay otros que tienen traviesas para sujetarlos y no se caigan.
Pero nos tenemos que ir, volvemos al bullicio de las calles con sus correspondientes tienditas.
En una de las entradas a Bhaktapur hay un enorme estanque de agua, se llama Siddha Pokhari.
Es el más grande de la ciudad y una vez al año hay festivales.
La gente pasea por los alrededores y en barco, también les dan de comer a los peces.
Vienen de todo el valle de Kathmandu.
Pasamos el arco de la ciudad.
Cogemos un bus que en una hora nos llevará a Kathmandu.
Un día muy bonito e interesante, nunca defraudan ni Patan ni Bhaktapur, tiene montón de cosas para ver, oir ... y siempre cosas nuevas.
Mañana iremos a otros lugares, pero eso es otra historia.
Agur.
Más cosas de Patan en: Patan
Y de Bhaktapur en: Bhaktapur