Nepal: 8 y 9-11-17. Patan - Kathmandu - Donosti

Kaixo, 8 de noviembre, llega el último dia de nuestro viaje, mañana toca tener mucha paciencia hasta llegar a Donosti.
Hoy vamos a ir a Patan o Lalitpur, me tomo el dia con tranquilidad e intentando que todo lo que vea se me grabe en la cabeza para no olvidarme.
Vamos andando y en una hora llegamos.
Al salir de Kathmandu volvemos a ver una zona donde hay varios templos caidos.




El rio Bagmati separa la capital de Patan.


Después de caminar por anchas y estrechas aceras, por donde no había aceras, o sea, de todo, llegamos a Patan.


A la entrada hay montón de tienditas donde, cómo siempre, venden de todo.


Cientos de motos, paso entre ellas como si no estuviesen, ya me he acostumbrado.


Patan es una ciudad con un patrimonio cultural y artístico muy importante.
Hay cientos de templos de todo tamaño, colorido ... pero a cual más bonito.


Templos pegados a las fachadas de las casas.


El monasterio o Mahabihar Lokakirti, hay muchos en esta ciudad.


Ahora está reconstruido y rodeado de grandes casas.


Siempre hay gente sentada y hablando dentro el patio.
Estos monasterios se construían con un patio rodeado de dos edificios de pisos con salas.
Los Mahabihar o Mahavihara está construidos desde el S. V al XII y muchos son monumentos históricos en Nepal.


Seguimos caminado entre calles y, sin querer, nos cruzamos con pequeñas plazas que siempre son distintas.


Con el templo correspondiente.


Y aquí veo el primer y único camión para reciclar, por algo se empieza, aunque tal como está el pais ...


Las ventanas de madera son preciosas.




Y con unos trabajos de calidad.


Los leones indican la entrada al templo.


La "corbata".


Una vecina hablando de sus cosas ... desde luego, las ventanas son pequeñas.


El templo de Manjushree, una cosa preciosa.


No había nadie, tranquilidad total.




Seguimos entre calles, es muy agradable deambular sin rumbo fijo pero siempre llegas a algún sitio que reconoces.


Puesto de chuches, al ataque !!!


Una abuelita vendiendo colgantes de flores.


Preciosos trabajos en madera.


El dios de la suerte, Ganesh, en cualquier templo que nos cruzamos.


Seguíamos entre calles, en cada rinconcito un templo.


Aunque el año pasado ya me recorrí durante horas esta ciudad, siempre hay nuevas sorpresas ... ahi va !!! un pozo ...


Pequeñas placitas, encantadoras, de juguete ...
Aunque en ésta algo tuvo que romper el terremoto.


Grupos de mujeres limpiando templos, tienen trabajo para varias generaciones.
Mi deseo era que no se cayesen de ese impresionante andamio. No os caigáis, eh ?.


Uno recién limpio, una moñonada.


Me encanta perderme entre calles sin saber a donde voy, viendo puesto de frutas.


O, en cualquier plaza, mujeres aventando el arroz.




Con sus altarcitos, como siempre.


Negociando.


Hay montones de puestos donde venden edredones.


En cualquier lugar.


Pensé, tengo calzoncillos ? si !!! uf !!! menos mal !!! ésos tienen que ser la órdiga ...


Entramos en otro templo: Minnath.


Dentro de la plaza hay varios talleres con de mujeres cosiendo ropa.


Junto al precioso templo.
Estos lugares siempre dan una sensación de tranquilidad aunque no seas de ninguna religión.


Lleno de figuras, la diosa Kali totalmente coloreada, es una de las principales del hinduísmo.
Destruye la maldad y los demonios ...


Increibles tallas de madera.


El templito parece de juguete. Junto a él hay unos troncos de madera para hacer carrozas en los dias de fiesta.


Pero que sería un templo sin monjes ?




En línea directa con Buda.




Seguimos nuestro caminar y pasamos por una carnicería, que hambre !!!


Pero nos volvimos a sumergir en las calles mas anchas del centro de Patan.


Cualquier lugar es bueno para ponerse a vender.


Ropas con montones de colores.


Paciencia ...     


Una hermosa tienda de ropa, todavía no han llegado las grandes marcas de ropa.


El templito, la campana y el rodillo para orar.


Al salir de la placita del templo, salimos a una calle por la que vamos a llegar a Durbar Square.


Los hilos del wifi por todos lados.


Hay montones de pìezas de este tipo para ponerlas en los templos.
Al fondo ya vemos la Plaza Durbar, todavía no habíamos entrado en ella.


En la ventana veo una de las piezas que se vendían en la tienda.






Y entramos en la Plaza Durbar, es una verdadera maravilla, andar entre estos templos es una sensación estupenda.
El Templo indú de Krishna Mandir, tiene montón de columnas, una preciosidad.


Gente andando de un lado para otro.


La amoña con la nieta.


Subimos a tomar un café a uno de los bares que hay en los pisos altos, la vista es preciosa aunque el terremoto la ha dejado desvastada.
La están recomponiendo pero van a un paso ...
Esta ciudad es uno de los lugares con más concentración de templos que existen.


Un ratillo para descansar, cafecito, escribir algo, ver cosas, una delicia.
Luego a seguir andando, a ver otras cosas.
Un puesto de verduras.


Ésto fué lo que nos hizo buscar un baretillo nepalí para comer algo.
Y luego pasamos por tiendas con mujeres cosiendo ropas.


Patan tiene dos grandes estanques, se cree que el agua viene del lago sagrado de Gosainkunda. 
Este es el estanque Pim Bahal Pokkari.


Algo se ha reconstruido y va quedando muy bonito.




En la misma plaza hay una estupa.
Hay que dar una vuelta a su alrededor.




Un precioso templo medio tapado por las casas.


Al final del pasillo han reconstruido el templito, muy bonito ha quedado.


Dos mujeres limpiando.


Seguimos viendo cosas, una mujer con la olla para cocer los Momos.


Pero ya nos teniamos que ir, nos subimos al bus para ir a Kathmandu, tarda media hora en llegar pero tuvimos que esperar otra media para salir.


Y ésto es todo, llegamos a Kathmandu, habíamos quedado con Udaya que nos acompaña dando una vuelta por Kathmandu, pequeñas plazas escondidas que no he visto,
un lugar donde venden un helado estupendo, Kulfi, muy rico, no lo había probado pero no será la última vez.
Está hecho con leche hervida que puede estar aromatizado con muchas cosas, mango, manzana ...
Tiene un sabor muy dulce y es muy cremoso.
También nos invitó a un yogur, también estupendo, llamado Lasi.
En un café hablamos con él de sus planes, de los mios con él para el año que viene que intentaré volver ...
Cenamos en un bar nepalí cosas muy ricas, Paneer y otra cosas, verdurittas, todo muy rico.
Nos despedimos de él hasta mañana, ahora tranquilidad, ya tenemos todo preparado.

Y llega el 9, mnientras desayunamos en el hotel, nos volvemos a despedir de Udaya, no nos olvida hasta el final.
Metemos todos los bártulos en la furgoneta del hotel para ir al aeropuerto.
A esas horas de la mañana Kathmandu es una gozada con muy poquito tráfico, miro hacia todas partes, pienso que volveré el año que viene ...
Salimos a las 10 y media de Kathmandu, paradita en Delhi y Madrid desde donde vamos en bus a nuestro pueblo.
Llegamos a Donosti a las 3 y cuarto de la madrugada del dia siguiente con los correspondientes cambios de hora.

Tantas horas de viaje da tiempo a pensar y acordarme de la gente que he dejado allí.De Sonija y su familia, la encantadora dueña del Hotel Yak, allí muy lejos en Kyangin Gumba, que gente más encantadora.
Todavía conservo el cordón que nos dió.
Se quedan allí, trabajando en condiciones duras, yo vuelvo a tener todo a mano ...
De los chavales, Jari, Prakash siempre riéndose, Suraj,  que nos ayudaron a llevar las mochilas hasta Kyanjin Kumba, si el año que viene vuelvo les llevaré queso de oveja, les encantó. Ojalá les vaya bien, yo vuelvo a tener todo a mano ...
Las chavalitas y chavalitos de Kathmandu, Raj, Karisma, Ansu, Kopila, Aayush, Puran, sajina ... ojalá les vuelva a ver el año que viene, tienen suerte de estar en una casa y no en la calle, cuánto me acuerdo de ellos, pero yo estoy aquí, con todo a mano ...
De la mujer con la que coincidimos en una etapa del trecking, cómo andaba la mujer, al llegar a un Lodge buenas risas hicimos, pero supongo que habrá mucha más gente que, necesitando ayuda, medicos, alguna mujer embarazada ... tenga que recorrer esos caminos para llegar a Kathmandu para a ver un médico y no morir en el intento, cuántos dias ? seis ?, siete ? pero yo estoy aquí, con todo a mano ...
Gracias Udaya por todo lo que nos has ayudado.
A tu ama, Radika, hermana, mujer, Manju, y tu chaval, Gauranga, menuda pieza ... Amit ...
Gracias por el estupendo Dal Bhat con el que nos recibísteis, pero yo estoy aquí, con todo a mano ....
Ashok, el dueño del Hotel Donosti de Pokhara, una persona excepcional, que ha tenido que trabajar duro para conseguir lo que tiene aunque le hayan ayudado desde aquí ...
Magnífica persona, pero yo estoy aquí, con todo a mano ... 
Bebiendo cervezas a un precio imposible para ellos aunque al final del treck les invites y pases un rato imposible de superar ...
Todas esas personas con las que nos hemos cruzado por caminos y que nos hemos despedido sabiendo que a muchos no les volverás a ver nunca ...
Soy un "guiri" aunque no lo crea ...
Es un  país pobre pero la gente está dispuesta a darte hasta lo que no tiene, y yo estoy aquí, con todo a mano ... "MI" casa, "MI" coche, "MI" puto dinero, "MI" todo ...
Nepal no sólo es montaña.
El año que viene volveré aunque sólo sea para volverles a ver. Esta gente "engancha".
Agur.
Namaste.