Petretxema, otra vez allí arriba.

Kaixo, el 11 de agosto me llamaron unos amigos para subir al Petretxema, a una de mis zonas favoritas, uno de mis primeros montes de esta zona, hace ya un montón de años, en seguida les dije que si, y hacia allí me fuí para dormir en el refugio de Linza y, al dia siguiente, intentar subirlo.
Tiempo estupendo para andar aunque a la mañana no hacía el fresco que esperaba.
Sobre las 7 de la mañana ya estábamos listos.
Empezamos con los primeros repechillos, el cielo totalmente limpio.


En seguida el sol iluminó el Ezkaurre.


Y, un poco más tarde, junto al Ezkaurre, el Txamantxoia, espectáculo total aunque lo haya visto muchas veces.
Íbamos sólos, el sendero para nosotros.


Txamantxoia o Maz, un monte muy bonito y con unas vistas impresionantes hacia todas las cimas de la muga.


Me paraba cada poco tiempo para ver cómo se iluminaban los montes, desde los Alanos, el Espelunga, hasta el Ezkaurre ...


Seguía subiendo tranquilamente, hundido en mis pensamientos, hasta que apareció un monte que me encanta: Atxerito.
También aparecieron los murallones de Gamueta.


Seguíamos por los machacados senderos, yo, cómo casi siempre, atrás ... viendo el Atxerito.


Lirios, Iris Piranaica, un montón, aunque muchos estén ya en las últimas.


Llegamos en seguida al collado de Linza, punto de separación entre el Petretxema y la Mesa de los Tres Reyes.
Nosotros nos dirijimos al primero.
El sol de frente pero, como se suele decir, si no puedes ganar al enemigo únete a él, o sea que me dispuse a sacar algún contraluz.


El senderito que nos lleva hacia la base, yo iba al final, a mi aire, de vez en cuando tenía alguna conversación de algo pero en seguida y sin querer volvía a mis pensamientos.


Budogia y la Mesa, hacía unos dias que había estado allí arriba.


Subíamos poco a poco, parecía que el Petretxema se iba quedando abajo.


Unos lirios nos indicaban el sendero.


El gran macizo de La Pakiza de Linzola y, a la izquierda, el collado de Linza.


Atxerito, Gamueta, nunca me canso de verlos ...


Y, un poco más arriba, aparece la puntita de Espelunga.
Delante una zona de piedras, un desierto de rocas, agujeros ...


La cimita de Mouscate delante de la Mesa y Budogia.


Y las lomas de Ukerdi.




Pulsa en la foto y la verás más grande.


Al rato y, después de subir la última aldapa, nos pusimos en la cima, que gozada, no hacía calor, más bien fresco a causa del airecillo.
Delante de la Aguja de Ansabere.
Y el sol de frente cómo casi toda la subida.


La Aguja y al fondo el Midi.


Entre las brumas.


Desde la cima hacia Lakeleta, Lakartxela, Otxogorrigañe y Barazea, al fondo el Ori entre nubes.
Habia mucha bruma.


Maz o Txamantxoia.


Estamos un rato, mientras saco alguna foto, me acuerdo de las veces que he estado aquí arriba, con uno, otro, sólo ...
Sobarcal, Txipeta Alta, Atxerito, Gamueta, Espelunga ... una gozada estar aquí arriba otra vez.
Hemos estado sólos, solamente una persona ha llegado pero en seguida se ha ido. Volvemos a estar en plena soledad.


Al rato, corto para mi, pero el airecillo nos estaba dejando frios, empezamos a bajar hacia el collado de Petretxema.Que pena ...
Además esas nubes que aparecían por el sur ...


La Aguja Pequeña de Ansabere, el circo del ibón de Atxerito, otro lugar fantástico.


Unas preciosas Margaritas: Estrella o Aster Alpino.


Seguimos bajando hacia el collado, nos cruzamos con gente, cruzamos algunas palabras y seguimos cada uno nuestro sendero.


El Sobarcal y Atxerito ya se han quedado allí arriba.


Otro grupillo de flores.


En el collado está la muga número 273.




Veíamos allá arriba la Aguja Menor de Ansabere.


Preciosidad.
Las florecillas de rayas son: Anagálide de Pantano (Anagallis Tenella) y las fucsias: Vulneraria (Anthyllis Vulneraria).


"Ése" árbol nos indica la dirección a seguir ...


Vamos por un sendero estrecho, solitario y salvaje.
Al fondo Txamantxoia.


El valle se va estrechando según bajamos.


Para volverse a abrir.


En la roca sale los pinos en plena supervivencia.


De allí bajamos por este estrecho sendero. Una gozada de lugar.


Distingo el camino en medio de la pedrera, siempre con el Maz en frente.


Tranquilamente nos acercamos al sendero de la pedrera.
En la bajada pensando en la gente con la que he andado por aquí ... hace tantos años ...


Por allí hemos bajado, ahora toca un poquito de hierba, cosa que agradezco.


Seguimos tranquilamente hasta entrar en un magnífico bosque. Sombra, agradable ...


Una gozada andar por ahí.


Noto que nos queda poco.


Y ya casi al final una iturri, que fresquita estaba el agua, habia que echar un trago.


Y ya hemos terminado, el refugio de Linza, debajo de Txamantxoia, nos espera con una espléndida cervecita ...


Una salida muy bonita en muy buena compañia.
Muchos buenos recuerdos y otros mejores ...
Habrá que volver otra vez.
Agur.

Éste es el track de la salida: