Egipto 2023, 15-03-23: Deir el-Medina, Medinet Habu, Karnak (II-II)

Kaixo, 15 de marzo, viene la segunda parte, hemos dejado atrás los colosos de Memnón, el templo de Hatshepsut, el Valle de los Reyes, lugares fantásticos y vamos otros lugares igual de fabulosos: Deir El Medina, el pueblo donde vivían los trabajadores de las tumbas que eran gente especializada y hay varias de sus tumbas.
También el impresionante templo de Ramses III y, para terminar el día de hoy, iré a Karnak, otro sitio para no olvidar.
Todos están alrededor de Luxor, la antigua Tebas, un lugar que para visitar todo necesitaría dos o tres reencarnaciones.
Por aquí estamos andando.


Y por dónde hemos andado hoy.








Por el camino veo casas abandonadas en la ladera de las lomas.








Llegamos a Medinet Habu, en esta ciudad está el templo de Ramses III, hoy a la mañana he estado en su tumba, en el Valle de los Reyes, es de lo mejorcito de Egipto.
Llamado también "El Templo de Millones de Años".
Ramses III, de la XX dinastía, lo construyó como su gran templo funerario, "sólo" tiene 150 metros de longitud.
Se ven los relieves de las luchas entre el faraón y los Hititas y los libios, no fueron grandes amigos.
Entramos en el templo por el pilón ptolemaico, aquí estaba el embarcadero para unir la ciudad con el Nilo por un canal y a la izquierda el Lago Sagrado.
En el pilono izquierdo está Ramses III contra los Nubios delante de Amon y en el derecho contra los sirios con el dios Ra-Horajti.
Todo estaba rodeado de un gran muro de adobe y, a su vez, de otro gran muro.


Tenía varias capillas, dos templos, el Palacio real, varios patios y unas salas hipóstilas con unas enormes columnas.


Pasar por estas enormes puertas tendría que atemorizar a cualquiera.


Una estatua de la gran sacerdotisa Amenardis I, tiene una capilla en este templo.


Vamos pasando al primer patio.




De repente se abre y aparece el primer patio con el pilono de acceso de 24 metros de altura y 63 de ancho.
Veo los enormes relieves de Ramses III derrotando a los enemigos y a los pueblos del mar, junto a él están los dioses Ra-Horakhty y Amón.
Los cuatro agujeros que había eran para colocar las banderas.    


Ramses III derrotando a los enemigos, hay varios, siete u ocho, por las sombras que hay en el relieve, los está ofreciendo al dios Amon.
Hay muchos relieves relatando las batallas de Ramses III.


El techo de acceso al segundo patio.


En el pórtico norte están las estatuas de Ramses III en forma de Osiris.


En el pórtico Sur unas impresionantes columnas papiriformes, hay ocho.


Me meto a curiosear en los pasillos.
En los pórticos hay muchas escenas de batallas del faraón.
En la pared norte hay impresionantes relieves dónde se ven soldados contando manos y genitales cortados para así saber el número de enemigos derrotados y representando la victoria de los egipcios sobre los "Pueblos del Mar", estos pueblos eran originarios de otros lugares del Mediterráneo. Hay más en otras zonas de los muros.
Esta era una práctica habitual para contar enemigos muertos e incluso los soldados, al final de la batalla, las llevaba delante del faraón para demostrar su fuerza y, de paso, cobrar alguna recompensa por su valor.Esto está demostrado a cuenta de pruebas forenses encontradas.    


Menudo trabajo para hacer esos bajo relieves.


En los techos aparece la diosa Nejbet, protectora del Alto Egipto, entre otras cosas, con apariencia de buitre blanco, debajo de ella se ven los cartuchos de Ramses III.
Con el "nomen", nombre de nacimiento, en el cartucho de la derecha y "prenomen", nombre de entronización, en el cartucho Izquierda de Ramsés III.


Los dibujos son magníficos.


El paso a la sala Hipóstila.


Con el precioso techo.


Un magnífico pórtico, todavía se ven los colores originales.


Guardianes del templo.


Ramses haciendo ofrendas a Amon, derramando vino, con una deidad a su espalda, qué bonito.


El resto del mismo relieve con diferentes divinidades.


La diosa Nejbet y la Barca sagrada.




Sigo a la sala Hipóstila, en este patio estaba la sala funeraria de Ramses III.
Había veinticuatro columnas, cuatro grandes y ocho más pequeñas a cada lado del centro.




Se distinguen las representaciones del loto, símbolo del Alto Egipto y del Papiro, símbolo del Bajo Egipto.


Y aparece una cuadrilla de chavalas que, al preguntarles si querían fotos, no dudaron en decir que si, los móviles echando humo.


Volvemos sobre nuestros pasos, me vuelvo a quedar asombrado viendo semejantes columnas y dibujos.


Volvemos a atravesar los patios, es todo gigantesco.


Pero, como en muchos lugares, la chavalería de la escuela ha venido a hacer visita.




No puedo dejar de fijarme en los miles de jeroglíficos que me encuentro al paso.


Preciosas escenas de caza y pesca.
El faraón está en su carro con dos caballos empuñando una lanza para arrojarla a un toro salvaje.
Se ven dos toros cazados y un tercero herido a flechazos delante del carro.
Debajo hay varios guerreros con escudos y lanzando flechas espantando a pájaros y peces que salen huyendo.
Es una maravilla de relieve.


Hay muchos turistas internos.




Y nos despedimos de este precioso templo viendo la profundidad de la construcción y eso que mucho ha desaparecido.
Las escenas de guerra de Ramses III son bellísimas, hay a montones, como para pasarme un par de días sin salir de aquí.


Llegamos a Deir El Medina, está cerca del Valle de los Reyes, sus casas están en el desierto.
Fundado por Tutmosis I III de la Dinastía XVIII fue habitado por obreros y artesanos para construir y hacer los jeroglíficos de las tumbas, tuvo su mayor grandeza en tiempos de Seti I y Ramses II y fue abandonado en el 1170 a.C.


Su nombre en egipcio es Set Maat, "el lugar de la verdad" y Deir El-Medina en árabe.
Tuvo muchos saqueos, pero aún conserva tumbas de los propios trabajadores.
Alrededor de una calle se construían las casas.


Las casas eran de una planta, de piedra y paredes de adobe con los techos de troncos.
Tenían 4 salas y en la última había una escalera para acceder al tejado.


Firmaban un contrato, diez días a ocho horas diarias, para la duración y el salario y se pagaba en especies, por lo demás ellos mismos tenían cerdos, cabras y ovejas.
A más cualificación más salario, había escribas, médicos, obreros, artesano, especialistas ...


Hay varias tumbas, entramos en la de Inherkha, Inerjau o Inherkhau, la TT359.
No se conformaba con una tumba, tenía dos, ésta y la TT299.
Era un capataz muy importante, dirigía la comunidad de artesanos, estaba casado con Wab y tenía varios hijos e hijas.
En estas tumbas sólo hay dibujos, no se ven alto ni bajo relieves como en las tumbas de los faraones.
Hay escenas tanto de ritos sagrados (momificación) como familiares, son muy bonitas.


Escenas del Libro de los Muertos y de las Puertas.
Unas personas, dibujadas de dos en dos, caminan hacia el difunto Inherkhau.


Representa al dios Thoth presentando a Inherkhau en presencia de Osiris.


Uno de los cuatro chacales adorados por Inherkhau, se ven los cuatro, uno detrás del otro.


Inherkhau y su esposa reciben ofrendas de dos de sus hijos, Kenna y Armin, mientras estaba rodeado de cuatro nietos, uno de ellos está medio borrado.
Anerkhau juega con un mechón de pelo de una de sus hijas, que está delante de él totalmente desnuda.
Lleva un fino collar y brazaletes en sus brazos, muñecas y tobillos, y un pendiente circular. La hija le da una paloma blanca con motas negras a una de sus hermanas menores en cuclillas a los pies de su padre.
Un niño se encuentra, sin ropa ni joyas, que pone sobre las rodillas de su madre.
Por último, la chica desnuda que está detrás de la silla de su madre también tiene un pequeño pájaro.
Las chicas, tienen un mechón de pelo similar a la voluta de los sacerdotes Sem y los niños de la realeza. El resto de su cabello se corta en tres bloqueos de plano en la frente y un cierre en forma de espiral en la parte posterior de su cabeza.
Solamente las chicas pendientes, collares, brazaletes y tobilleras.
El niño pequeño tiene un peinado como el de sus hermanas, excepto que no lleva joyas.
Inerkhau y su esposa se muestran con cuatro niños muy pequeños.


Y seguido de la anterior.
Las transparencias de los vestidos dejan ver las siluetas de los cuerpos.
El primero tiene un recipiente para hacer una ofrenda de libación derramando algún licor para un dios y un incensario.
Lleva una banda blanca de tela, la falda tiene más adornos y va con sandalias.
Luego hay una mujer, cantante de Amón, que lleva una pequeña botella donde puede haber un aceite aromático o un bálsamo de la unción.


Inerkhau, está sentado solo en una silla. Tiene el cetro Sekhem en su mano izquierda contra su pecho, que se extiende hacia abajo, la palma de la mano derecha en la dirección de un pedestal en el que se encuentra una caja de color, posiblemente, la "pintura de los ojos".
Esta pintura de los ojos se encuentra en un ataúd blanco grande dividido en dieciocho particiones decorado con un ojo "Udjat" pintados en tonos azules y rojos.


Inherkau haciendo ofrendas a la reina Ahmes-Nefertari, ("la madre Real, la Gran Esposa Real"), con la piel de color negro.




Jeroglíficos delante del arpista ciego.


El arpista ciego toca (con la letra de su canción) para el fallecido Inherkau y su esposa Wab.
Están sentados en unas bonitas sillas y con ropas muy elegantes.
El arpista es un hombre obeso, con la cabeza afeitada y con pendiente, en cuclillas sobre una estera.
Él no es ciego, aunque se pintan de esta forma.  Su boca está abierta porque está cantando.
Son retratados de formas raras, las manos de forma extraña en las cuerdas, los brazos muy flacos por la gordura del resto del cuerpo, los pies también.
Los brazos están en el mismo lado del arpa, éste es un estilo típicamente egipcio muestran que, para tocar el arpa se necesitan las dos manos.
El arpa se apoya en el suelo detrás de los pies de la persona fallecida y, en la parte superior termina en forma de cabeza de halcón.


El dios del sol Ra, en forma de Miuty, el "Gran Gato de Heliópolis" hiriendo a la serpiente Apophis que está enrollada alrededor del árbol sagrado Ished o Persea.
Los detalles del Gato son estupendos.
Los gatos tenían una especial predilección para los egipcios y al morir les daban descanso eterno momificándolos y enterrándolos en sarcófagos.
El Gato aparece en muchas escenas, parece que es la representación del bien sobre el mal.


Inherkau haciendo ofrendas, también transparentando las piernas.


Inerkhau se arrodilla haciendo un homenaje a la salida del sol con el signo "Anj", de la Vida.
También se ven dos leones de espaldas, representan el "ayer" y el "mañana.


Encima de la barca van cuatro divinidades, en la parte delantera Isis, luego Thot con la cabeza de un ibis, el tercero Khepri con la cabeza del escarabajo, y el cuarto es Hu.
Inerkhau está detrás de ellos, de blanco guiando el barco con los reos.


Frente a un altar apoyo a un vaso de libaciones y dos panes.
El sacerdote lleva la máscara de la cabeza del halcón y lleva en su mano un hacha la cual se aplica en la boca (después de las otras aberturas de la cara).
La ceremonia se practica en la momia (más precisamente, el sarcófago interior).
Esto incluye una base blanca en la que se obtuvieron bandas de color rojo que representan a las vendas.
Es una preciosidad como está todo dibujado.


Varias escenas seguidas. Otra maravilla.
Todo el fondo de las pinturas está de color amarillo.
Las "Almas de Nekhen" con cabeza de chacal y adorando al "pájaro Benu" delante de Inherkau.


La decoración es muy refinada.
Inherkau adorando, con los brazos levantados, al "pájaro Benu" o "Fénix de Heliópolis", se corresponde con la garza real.




Anubis ofrenda un corazón a Inherkhau, representado en forma de sarcófago, entre ellos, una cesta de celebración con un pan rectangular y dos redondos.
Detrás del dios vemos un fetiche Abydos, un santuario que se supone que contiene la cabeza de Osiris.


Una preciosa escena en tres partes.
La zona de la tumba como monumento religioso.
El difunto Inerkhau y su esposa, mirando al este y sobre unas sillas reciben las fumigaciones de incienso y una libación de agua de dos hombres con falda larga y el pecho cruzado con otra banda, parece que representan a dos hijos de ellos.
Todos llevan pelucas.


A continuación, hay seis hombres rapados con sandalias, los cuatros últimos son dos por las sombras pintadas.
El primero es un sacerdote Sem o funerario, con una piel de pantera. Lleva un incensario con la cabeza de un halcón con la mano izquierda y tiene una jarra que gotea en la mano derecha.


Y por último, con su atuendo festivo están Inerkhau y su esposa, sentados frente a un pedestal con cuatro velas en llamas, con su humo en dirección al fallecido.
Las velas tienen una forma cónica, con una mecha en espiral por la parte exterior de color rojo.
Inerkhau pasa su brazo izquierdo sobre el hombro de su esposa y con la mano derecha, echa agua sobre sí mismo. Su mujer, Wabet, envuelve su brazo derecho alrededor de su marido, la mano apoyada en su hombro derecho, cerca de su cuello.


Inerkhau y su esposa ya fallecidos sentados frente a una mesa de ofrendas.
Su mujer presiona su mano izquierda sobre el hombro de su marido, como protegiéndole.


A la derecha un "patrón de vaca" desde el techo de la cámara superior del Libro de Las Puertas.
Los techos tienen unos dibujos excepcionales.


Inherkhau sentado solo en una silla, la proa y la popa termina en una flor de loto, a los dos lados de la silla hay dos "ojos" o Udjet, los ojos de Horus.
Dos remos y sus soportes, terminados con la cabeza de halcón, indican la dirección de la navegación y van a cado lado de la barca.
Con sus brazos abiertos estira un trozo grande de algún material blanco detrás de los hombros, una imagen poco común. 
En el cuello lleva un collar de perlas de colores con una diadema en la cabeza.
Se ha dejado la barba corta y "cuadrada de la vida".


A la salida de esta tumba tan preciosa vemos un panel de otras tumbas cercanas.
Desde la antecámara de la TT218 también se accede a tres tumbas, la propia TT218, la TT219 y la TT220.
La TT218 pertenece a Amennakht que era el padre, la (TT219) era el hijo Nebenmaat y la TT220 el otro hijo, Khaemteri los tres con el título de "Sirviente en el lugar de la Verdad".
Se ve que hay dos estilos de decoración, la TT218 es policromada y las otras dos son monocromas.
Las descubrió Bernard Bruyère en el S. XIX.
Ahora nos dirigimos a la primera, la de Amennakht o Amennajt (TT218).
Era un importante escriba real y dibujante, hijo de Ipuy, que vivió entre las Dinastías XIX y XX.
La tumba tiene dos salas policromadas preciosas.


Osiris está sentado en su trono sujetando un mayal y un cetro. Delante de él, una divinidad sentada le ofrece un cuenco con velas encendidas.
Detrás, los brazos de un ojo de Wadjet ofrecen lo mismo.
La Diosa Nut emerge de la montaña roja del oeste, con un disco solar.
Estos preciosos dibujos están en la antecámara, al entrar en la tumba.
También están a la entrada de otras tumbas.
Abajo se ve algo del paso a la primera sala.


En la antecámara, también está repetida en otras tumbas de Deir el Medina.




Desde la antecámara de la TT218 pasamos a la TT219, perteneciente a Nebenmaat.
Tiene dos salas pintadas, sobre todo, de amarillo.
El propio Nebenmaat, yace sobre un lecho de momificación en un ataúd y Anubis está dispuesto para abrir la boca del difunto.
Las paredes de esta tumba están pintadas de forma monocromática, negro sobre amarillo.
Encima está representada la diosa Neftis o Nephthys.


Encima de la foto anterior.
La diosa Nephthys, madre del dios Anubis, tía del dios Horus, esposa del dios Seth, hermana gemela de la diosa Isis, y a su vez hermana del dios Osiris. Era hija de Geb y Nut.
En egipcio antiguo su nombre era "Nebet Het" o Nejbet que se ve en las paredes de muchos templos con alas de buitre.


Anubis llevando a Nebenmaat delante de Osiris.


Los dibujos son mucho más sencillos que los del resto de tumbas y el fondo es blanco.
Plañideras llorando en la cámara funeraria de Nebenmaat.


Dando ofrenda a las divinidades.


Antecámara.
Una gran palmera Dum, un tipo de palmera, llena de dátiles y Nebenmaat rodeándola con su cuerpo.


En la segunda sala hay varios dibujos de deidades funerarias y distintos siervos.
Pertenece al Libro de los Muertos.
Arriba Osiris y Thot.
Abajo Anubis.


Campos de Iaru (Aaru), escritos en el capítulo 110 del Libro de los Muertos.
Laru o Aaru era los campos paradisíacos donde vivía Osiris y otros importantes dioses.
En este lugar descansan las almas justas que han pasado las pruebas de la Muerte.
Abajo a la derecha hay una barca con serpientes.
Arriba una barca con flores de loto.


Un sacerdote con la máscara de Anubis completa la momificación de Amennakht.
El ave es el alma del difunto con cabeza de halcón.
Los daños en la pared muestran dónde se colocó el ataúd.
Este dibujo está en la segunda sala policromada.


Todos los techos redondeados están dibujados, son de la segunda sala.


Amennakht y en la Barca sagrada con el "pájaro Benu" o "Fénix de Heliópolis", se corresponde con la garza real.
Está en la antecámara.


Salimos del grupo de las tres tumbas y nos dispusimos a entrar en la tumba de Sennutem o Sennedyem (TT1).
Artesano del Valle de los Reyes durante la Dinastía XIX cuando estaban Ramses II y Seti I.
Vivía con su familia en el poblado de los Artesanos y fue enterrado con su familia en esta tumba cerca de su casa.
Su mujer se llamaba Lineferti y aparece con él en alguna escena.


Y entramos por unas escaleras que descienden en la tumba.


Es pequeña pero muy bonita, una de las mejores y mejor conservados los dibujos.
Esta y la siguiente van de arriba a abajo, es la representación del "Campo de Rosas".
Entre dos babuinos con los remos, el dios solar con el dios Re-Haractes (Ra) sujentando la Barca sagrada con cabeza de Halcón con el Anj o "Llave de la Vida" y el disco solar encima, también el escarabajo sagrado en representación el dios Khepri.
Debajo Sennedyem con barba cuadrada orando ante Ra, Osiris, Ptah y otros dos desconocidos.
Un personaje, uno de los hijos de Senndyem, en una barca y, al final, la ceremonia de la apertura de la boca.


Esta composición es preciosa, en los campos de Laru (Aaru) lugar donde crecen grandes árboles y bonitas flores, pero, para poder vivir en él, Sennutem y su mujer tiene que trabajar en él.
Sennutem está recolectando lino luego Lineferti, su mujer, sembrando el grano y él arando con dos vacas, al final se ve un gran árbol.
Debajo una zona de árboles separados por un canal para regarlos que viene de un gran río que rodea toda la escena.
Hay palmeras, cactus, mandrágoras.
Estas dos escenas anteriores son una preciosidad y muestran escenas de la vida del campo.


Es muy parecido a la siguiente, Sennedyem adorando a tres divinidades, la primera es Horus con cabeza de halcón y cuerpo rojo, las otras dos son dos de los cuatro hijos de Horus.


Sennedyem de pie y con las manos levantadas adorando a tres dioses, el primero es Thot con el cuerpo de color rojo.
Las dos siguientes tienen cabeza humana, la primera es de color blanco y la segunda lleva la Doble Corona y la cara de color verde.


Dos dioses Anubis en forma de chacal, enfrentados, con una cinta roja alrededor del cuello.
Entre ellos hay un altar con un vaso Canopo de color rojo y dos flores de loto entrelazadas, encima hay dos ojos, Udjati, y el símbolo "Shen" redondo y de coro verde encima de tres líneas de agua. 


Sennedyem, un sacerdote con una máscara de Anubis lo está momificando.
Su cama es antropomorfa con un león que simboliza el final del viaje a la Duat.
La Duat era el inframundo donde se celebraba el juicio de Osiris. 


Sennutem entre dos dioses Neftis y dentro del sarcófago con la barba postiza en curva.


Y, después de estar viendo estos dibujos e intentar saber qué son, salimos por las empinadas escaleras de la tumba a la luz.


Casi al lado está el templo de Hathor y hay que aprovechar la oportunidad para curiosear un poco.


Su construcción la empezó Ptolomeo IV y la siguió Ptolomeo VI y VIII durante 60 años.
Se hizo sobre construcciones anteriores y era en honor a los arquitectos divinizados Imhotep y Amenhotep y a las diosas Hathor y Maat.
Junto a él, está el "Pozo de los Óstraca" de 42 metros de profundidad, era para obtener agua para el pueblo, pero del que se sacaron gran información sobre las dinastías XIX y XX.
Fue reutilizado como Monasterio Copto.
Está rodeado por un muro y fuera tiene varias capillas.


La pequeña sala peristila sin techo y con columnas a ambos lados con unas escaleras para subir a la terraza.


Y tres capillas con unos relieves fantásticos de muchos dioses, sobre todo la diosa Hathor.




Las tres siguientes fotos están en la misma pared.
Abajo, el dios Horus recibiendo ofrendas de Ptolomeo IV y, detrás de él, la diosa Maat con la pluma de avestruz.


Esta pequeña capilla tiene bellas escenas de ofrendas y representación del Juicio de Almas.


La diosa Maat con su sagrada pluma de avestruz en la cabeza.


Haciendo ofrendas a varios e importantes dioses.


En el medio la diosa Maat.


Después de ver el "Pozo de Óstraca" que, efectivamente es un pozo, nos fuimos de estos preciosos lugares.
Aunque al irme me voy lleno de relieves, dibujos, tumbas y demás, al recolocarlos en la memoria me quedo con ganas de volver a verlos para ver más detalles, es increíble la maravilla que hacían estos especialistas y con colores tendrían que ser obras maestras.
Atravesamos campos labrados con palmeras por todos lados.


Con espantapájaros en los campos.




Volvemos a atravesar el Nilo.


Por la carretera hay de todo, el borrico tranquilo, a su aire, pero más rápido de lo que parece.


Vemos varios minaretes de mezquitas.


Y los taxis, buen lugar para mantener una animada conversación.


Y, en seguida, llegamos al último lugar de hoy, impresionante también.
Entrada al templo de Karnak.
Intef II, rey de la Dinastía XI empezó las obras del templo de Amon-Ra en Tebas, junto a la ciudad de Karnak.
A parte de Amon-Ra también se hizo en honor a otros dioses, pero en menor medida como Montu (Jonsu) su hijo, Mut su esposa, Opet, Ptah ... todos tienen su recinto correspondiente con, a su vez, varios templos.
A partir de aquí, durante dos mil años, todos los faraones siguientes, más de 30, continuaron construyendo y ampliando el templo.
Es muy interesante la forma que tenían de construirlos, según la salida y puesta del sol.
Karnak se hizo en el eje este-oeste hacia el punto por donde sale el sol en el solsticio de invierno.
Todo está rodeado por un muro de 550 por 523 metros y ocho metros de grosor de adobe.
En su mayor apogeo puede que llegase a tener hasta 80.000 sacerdotes, al ser sagrado la gente del pueblo no podía entrar.


La maqueta que vemos da una pequeña idea de su tamaño colosal, era el complejo religioso más importante del antiguo Egipto.


La entrada con las columnas.


Una antigua foto aérea y el Lago sagrado.


Cruzamos la enorme plaza antes de llegar a los pilonos, ya me "suenan" de otros templos.


Estaba dedicado a Amon, el dios más importante de todos.
A cada nuevo faraón que llegaba quería hacer más templos y obeliscos en honor al dios y otras divinidades.


Un panel de los distintos lugares arqueológicos de la zona.


La impresionante "Avenida de las Esfinges" en una de las entradas y unian Karnak y Luxor.
Tenía casi 3 kilómetros y, al principio, había 1350 estatuas.


Con cabeza de carnero, que simbolizan al dios Ra, eran las guardianas y protectoras.


Según me voy acercando me doy cuenta de las medidas del Templo.
A la izquierda de la entrada está la estatua de Ramses II.


Esfinges de cabeza de carnero.


Estatua del faraón Pinedyem I reutilizando otra de Ramses II con su hija Benanta a sus pies, está en el primer patio del Templo de Amon, a la izquierda de la entrada.
Pinedyem I o Pinedyem fue un faraón de la XXI dinastía.


La sala hipóstila y el Obelisco de Tutmosis I, me veo pequeño debajo de tales moles de piedra.
La construyó Seti I y su hijo Ramses II.
Los obeliscos se traían de las canteras de Aswan.


Son 134 columnas de las que doce centrales eran más anchas y elevaban el techo, desaparecido, a 23 metros de altura.
Estas son columnas papiriformes.


El techo, allí arriba, ahora desaparecido, impresiona, son las que "sostienen el cielo".
Estas columnas son de papiro cerrado, esta sala se consagró al dios Amon, en sus tiempos tenía techo y era una sala cerrada.    


Hay que aprovechar esos momentos en los que no hay nada para perderse entre las columnas, todas con diferentes escenas, en un laberinto que parece que no tiene salida.
En muchas hay "Cartuchos" con los nombres de los diferentes faraones.


Todas las paredes con artísticos grabados.


Relieves con el árbol sagrado Ished o Persea.


De repente salgo de entre las columnas y aparecen delante los obeliscos de Tutmosis I y Hatshepsut.
El faraón Tutmosis I, de la dinastía XVIII, mandó colocar cuatro obeliscos que en su época se estaban a la entrada del templo de Karnak.
De ellos, solo se conserva uno, el de la izquierda, de 21,7 metros.
Su hija, Hatshepsut, construyó otro mayor, el de la derecha, de 28,6 metros.
A los pies de ambos hay otro obelisco de Hatshepsut.
Cada uno de ellos están hechos de una sola pieza de granito rosa.


Obelisco de Hatshepsut y sus jeroglíficos.






Estatua de Tutankamon como Amon con su esposa Ankhesenamun.




Una maravilla, distingo varias barcas, unas llevadas en hombros, otra remando, distintas divinidades ...


Precioso relieve en color de los dioses Horus y Path.
Hay muchos relieves de muy diferentes acontecimientos de la época de Tutmosis III, cientos de príncipes con las manos atadas que este faraón derrotó.
El tratado de Ramses II con los Hititas y después de muchas batallas sin saber quién había ganado firmaron un acuerdo, y muchas más historias de faraones. 
Todo está escrito en estas paredes y columnas.


El escarabajo, se trata de una deidad que toma la forma de escarabajo pelotero, pues se creía que empujaba el sol a través de los cielos igual que ese insecto hace rodar porciones de estiércol. Se le relacionaba con el renacimiento, la renovación y la resurrección.
Hay uno muy grande de granito en Karnak.


Los obeliscos de Tutmosis I y Hatshepsut y largas paredes llenas de relieves con muchas divinidades.
Hay muchos relieves por todo el templo, es imposible ver todo despacio, no da tiempo, hay relieves de un Jardín botánico, bajo relieves con plantas, frutas y exóticos animales que Tutmosis III vio en uno de sus viajes y muchos más. 


Los obeliscos de Tutmosis I y Hatshepsut y el templo Fiesta Sed o Heb Sed para Amenhotep II.
Esta fiesta era una de las más importante del antiguo Egipto y se celebraba para la renovación de la fuerza y energía sobrenatural del faraón.


Un panel del lago sagrado.


Lo construyó el faraón Tutmosis III, de la dinastía XVIII, servía para los baños rituales de purificación de los sacerdotes antes de hacer los rituales de culto del dios Amon y representaba la creación del mundo.
Era también un símbolo de las aguas primitivas de donde surgió la vida, y además alojaba gansos sagrados (el ganso era otra representación del dios Amón).
Se dice que, aunque el lago recibe las aguas del Nilo, curiosamente no experimenta sus crecidas. Sus dimensiones son 120 x 77 metros, el equivalente a siete piscinas olímpicas.
Este lago artificial de grandes dimensiones (130 m de largo) es uno de los elementos más característicos de este templo. Su función principal era la purificación de los sacerdotes antes de proceder a los rituales diarios de culto ante el dios Amón.
Aquí aprovechamos que hay una cafetería para tomar algo porque el calor no era ninguna tontería.


Al fondo, Los obeliscos de Tutmosis I y Hatshepsut.
Delante otro obelisco de Hatshepsut también de granito rosa con unas inscripciones muy bonitas.
De aquí volvimos a la entrada, no había más tiempo, aunque me hubiera gustado seguir viendo estas preciosidades.


Los obeliscos de Los obeliscos de Tutmosis I y Hatshepsut, los relieves son fantásticos.


De vuelta, y no sé porque, me meto de nuevo entre el bosque de columnas de la sala Hipóstila de Amon Ra, me sigue fascinando.
Es sorprendente la magnitud de las columnas, su grandiosidad.
Le falta el techo.


En la zona alta tenía unas rejillas para permitir la entrade de la luz.


De repente, me encuentro sólo, abruma el pasear entre estas inmensas moles, no oigo nada.
Tenían que estar juntas para que los techos no se rompiesen.
Todas estaban talladas con relieves en color, ni me lo puedo imaginar.
Veo cosas que antes no había visto.


Aunque casi todos los pigmentos han desaparecido, todavía que algo en los techos.
En la gente casi ni me fijo, ni los oigo ...


Un plano de la sala hipóstila, al ir ni lo había visto.


Vuelve a aparecer el Obelisco de Tutmosis I.
Hay gente, pero se minimiza entre las columnas, a veces casi se me olvida de que también están viendo todo esto.


Volvemos a encontrarnos, parece más grande que antes.


Con el obelisco de Tutmosis I salgo de este inmenso templo, y, como siempre, no puedo imaginármelo en su mejor época, todo colocado y pintado, a los enemigos los tendría que asustar y a los amigos temer.


Hay muchas esfinges dentro de templo, solían ser parte de la avenida de las esfinges, pero se reubicaron cuando se construyeron los pilonos de la entrada.


El obelisco de Tutmosis I, allí, al fondo se queda, a lo mejor te vuelvo a ver, pienso ....


Unas se van, otras entran, así toda la vida, durante siglos.




Todavía impresiona una vez que he salido.




Salimos de Karnak, es increíble todo lo que hay e imposible imaginarlo pintado y todo construido, aunque hay montones de videos con la forma y colores que tenía.
Da ganas de volver y verlo de nuevo, siempre encontrarás cosas que antes ni te habías fijado y, encima, se van descubriendo nuevas cosas, una gozada.


Y esto es todo por hoy, aunque he andado bien y a gusto noto que la espalda está por ahí.
He estado todo el día viendo cosas, se me ha pasado rápido, tengo la cabeza llena de relieves, colores, nombres ... a ver cómo pongo todo en orden ...
Vamos al zoco a dar una vuelta y comprar alguna cosilla.
La he gozado viendo tantas cosas que hizo la civilización egipcia y, sobre todo, lo que más me gusta es desconocer todo lo que todavía tiene que estar bajo la arena del desierto.
Mañana vamos a otros dos maravillosos lugares, los templos de Abidos y Dendara pero, como siempre, es otra historia.
Agur.