Kaixo, hoy, 19 de octubre, llegamos a la última etapa, desde Kyanging Gumpa subiremos al Tserko Ri de 4.983 m.
Éste es el recorrido de todo el trekking.
Y ésta es la parte que haremos hoy. 1.110 metros de desnivel.
Toca levantarse pronto y para las seis pasadas nos ponemos a andar.
Desayunar chapati con mermelada y té, muy rico, también le compro a Sonia unas barritas de chocolate.
Las perspectivas se cumplen, está nublado y no tiene pinta de cambiar.
El camino no tiene ningún problema y pasamos por una zona llena de Edelweiss.
Siempre subiendo veo que al otro lado de la colina hay un enorme rio de piedras y algún riachuelo, en otra época estará a tope de agua.
Hay mucha niebla, casi ni se ve, de repente aparece una vieja borda, me parece estar en Aralar.
Caen algunas chispitas de nieve pero de la misma niebla.
Seguimos subiendo despacio, porque si aprietas un poco, en seguida se nota la "patata", vamos estupendamente.
De repente se va un poco la niebla para dejarme ver la cima del Tserko Ri.
Vamos muy bién, incluso intento ir un poco más de prisa para probar pero en seguida noto las pulsaciones, bajo el ritmo.
Uday va un poco más abajo, al fondo veo enormes caidas de piedras.
Y entre las nubes aparecen algunos picos, pienso que todo ésto sin nubes sería increible.
Seguimos subiendo despacio, ya ni me acuerdo lo que pensaba mientras iba tan despacio.
La cima un poco más cerca, tengo que subir por la izquierda.
Pienso que ésto está "chupado".
Y, al rato, llego a la cima, montón de banderolas. He subido fantásticamente.
En la cima hay varios coreanos y nepalíes.
Mi colegilla Udaya Banjara (Uday) en la cima.
No hacía frio, un airecillo que servía para mover las banderas.
De vez en cuando, se abría la niebla, íbamos todos corriendo a esa zona para poder ver hasta lo que no se veía ...
Hasta que se volvía a cerrar. Todos volvíamos a sentarnos esperando otra ventanita.
Sólo se oía su rumor.
Otra ventanita. Si estuviese depejado ... el año que viene ...
He subido el zoom pero no tengo oportunidad para usarlo.
Te dejabas envolver por ellas.
Después de un rato de gozar allá arriba, empezamos a bajar.
La senda no tiene problemas de ningún tipo.
Al fondo vuelvo a distinguir el enorme rio de piedras.
Valles enormes.
El rio de piedras.
Sus dimensiones son muy grandes, no las puedo medir.
Pulsa en la foto y la verás más grande.
Tendremos que cruzar ese rio, no me imagino cuando lleva agua, no veo ningún puente ...
El fondo del enorme valle sigue lleno de niebla.
Pienso pero no me puedo imaginar todo ésto con agua.
Nos cruzamos con un rebaño de yaks.
Y al rato vemos a Kyangin Gumpa.
Llegamos tranquilamente, son las 12,45 del mediodia, sin problemas, bueno ... algo noto la espalda ...
Por lo demás estoy contento de cómo he andado, en ningún momento he notado cansancio, la autoestima me sube un par de "enteros" y éso lo celebraremos.
"Relax", ordenar todo y una vueltita entre las casas.
Ésta es una casita con cosas bonitas, no me puedo reprimir y compro algún colgante, no se si por comprarlo o por estar un ratillo con gente que siempre sonríe, me lo paso bien regateando un poquillo pero sabiendo los dos que voy a comprar.
No me puedo negar a tan encantadora tibetana ...
Una mujer separando patatas por su tamaño, la verdad es que me he quedado asombrado de lo ricas que están.
Lavando la ropa.
"Tibetan shop", paso por ahi y me abren la cortina de hojalata, que cosas tan bonitas ... otro colgante ... a alguien se lo regalaré ... es que me ganan con esas risas que echamos ...
El agua está helada ...
Los crios jugando debajo de la "Tibetan Shop".
Hora de comer, una pizza estupenda, un poco al sol que se está estupendamente, "relax" cómo dice Uday.
Comento con él que el año que viene pienso volver y hablaremos para ir a otros sitios.
Al rato llega un helicóptero, se lleva a Kathmandu a media docena de turistas que deben estar enfermos o mal de altura o ...
Me entra una "modorra" que aprovecho para echarme una siesta debajo del peso de los edredones, gustazo.
Oigo las voces de los crios, un carpintero construyendo una casa de madera, los golpes de vez en cuando del martillo, silencio ... tranquilidad ...
Me dejo llevar por mis pensamientos, en mi pueblo, en la gente, en ti ... y en ti también ... y en el otro ... ésto ya se va acabando, bajar en un par de días, otro par en Kathmandu y vuelta ...
Se pasa la tarde despacio, tampoco hay prisa, el Chow Mein de la cena es estupendo, con montón de champiñones.
Y así llega el mometo de meterme en el saco con esos grandes edredones ...
Agur.
Éste es el track de la etapa: