Nepal: 4-11-18. De Lumbini a Kathmandu

Kaixo, hoy 4 de noviembre, vuelvo a Kathmandu, he estado un par de dias en Lumbini, me ha gustado, es totalmente distinto al norte, aquí han desaparecido las montañas y hay grandes extensiones de arroz, maiz ...
Ayer en la agencia me dijeron que el bus salía a las 5 de la mañana, pero ya estaba a las cinco menos cuarto por si acaso pero con algo de "mosqueo", no había nadie, sólo algún perro siguiéndome, alguna farola que apenas alumbra, tampoco veo la posible venta de billetes, pues qué bien ...
De vez en cuando pasa algún coche que levanta el polvo que está depositado en la calle, vaya ...
Pasa alguien, le pregunto y me responde: "May be", "puede ser" ...
Llegan las cinco, alguien se acerca pero no sabe, otro me dice que a las seis seguro, me vuelvo a quedar sólo, pienso en Marieta y susurro la canción: y yo con mi mochila como un gilipollas, madre ...
Vuelvo al hotel y les cuento mis penas, me ofrecen la habitación, se lo agradezco pero en seguida tengo que volver, ya hay más gente, pregunto y veo autobuses, no me extraña el no haber visto la oficina, es un txiringuito con tres maderas con alguien que vende los tickets, compro !!! ya son mios ... mi tesoro !!!
Hay dos franceses que están más moscas que yo, yo ya tengo "callo". "Nepal es Nepal", les digo, sonreímos.
Nos indican el bus y vamos hacia él pegándonos como lapas a la puerta. Ya está.
También el polvo nos envuelve, pasan buses, coches ...
Al final salimos a la seis y cuarto, bien, pero al kilómetro se para, vaya ... sigue, se vuelve a parar a las seis y media, seis cuarenta y cinco .. pero al final nos vamos, me coloco bien en el asiento, el bus no está mal comparando con otros.
Me distraigo viendo las cosas de la carretera e intento hacer alguna fotillo para recordar.
No estan muy allá porque desde dentro del bus y los baches se notan, hay fotos que parece que he sacado el cielo a causa del movimiento del bus.

Las bocinas de los camiones no son broma, de todo tipo, tamaño y variaciones de bocinazos.


Pasamos por el pueblo de Kawasoti.




Como siempre, con puestitos cerca de la "bus station".
Ya son las ocho, paradita de quince minutos, estoy a 255 kilómetros de Kathmandu.


Sobre las once de la mañana paramos en Darengat, me parece o algo así, a comer algo, Dhal Bat y un café. A las doce seguimos.
Ya hemos dejado atrás las estepas y nos vamos metiendo poco a poco en las montañas.
Los valles se van cerrando.


Pasamos a un camión con grandes troncos, después de sacar la foto me doy cuenta que estamos en plena curva y no se ve ni gorda, a base de bocinazos nos metemos en medio de los dos antes de que otro camión que bajaba ... tenía que haber seguido apretando el "botonziko" para no ver ... pero no será la primera ni la última vez ... ya estoy acostumbrado.


Hay varios camiones con troncos que justo suben la cuesta, les pasamos también.


Ya estoy en medio de la selva, todo verde, hay grupitos de casitas al otro lado del rio.


Canteras sacando piedras del rio para hacer carreteras, el aire hace que el polvillo de tierra se levante en remolinos.


Hay zonas en las que le valle se estrecha y la carretera solo tiene curvas pero es bestial el paisaje, enorme, la potencia del agua bajando por estos valles ... una animalada.


Al pasar veo un desprendimiento que se ha llevado un autobús por delante ...


Seguimos carretera arriba.


Centenares de desprendimientos a lo largo de la carretera.




Pasamos por algún pueblo, no paramos.


De vez en cuando vemos algún tortazo, hoy es el dia en el que he visto más accidentes.


En lugares donde el valle se ensancha hay pueblitos a los que hay que llegar cruzando puentes. A ese lado no hay carretera, sólo caminos.


Hay que hacer paradita para echar gasolina.


Y seguimos, en las orillas del rio hay playas de arenilla, el agua va deshaciendo las piedras hasta reducirlas a arena.


Casitas entre arrozales.


Y gente recogiendo piedras para las canteras. No quiero ni imaginar el sueldo ...


Aunque la foto está movida y hecha un asco, ésta es una de las muchas txabolas de hojalata con puestos de fruta para vender.
Con el polvo de la carretera no se como se seca la ropa que está colgada pero es lo que hay ...


Otro tortazo. Vamonos de aquí !!!


Arrozales.


Y lo que parecen berzas.


Grupos de casas al otro lado del rio.


Más canteras.


Que pinchas ?, ni un problema para arreglar o cambiar las ruedas.


Cualquier lugar es bueno para aprovecharlo y plantar arroz.


Pasa el dia, ya estamos cerca de Kathmandu pero lo de "cerca" es un sueño ... ni me lo planteo en Nepal.
Casas de todo tipo.


Carbón, hay varias empresas, contaminantes claro !!!




Y empieza a anochecer, ya no puedo sacar fotos, sin luz y con ese "meneo" la cámara ya ha hecho su trabajo.
La entrada a Kathmandu, la cuesta de la carretera para subir a la zona alta es, como siempre, demencial, además están en obras pero sigue igual que el año pasado.
Aún así sólo tardamos una hora en subir hasta el collado, pero los últimos 25 kilómetros son para recordar.
Llegamos a las seis de la tarde a la parada, me junto con un chaval de Toulouse que está despistado y subimos a un taxi, regateo y en media hora pasada llegamos a Thamel, me da pena el taxista, estoy a quince minutos del hotel, prefiero ir andando, tardaré menos y al taxista le hacemos un favor porque si le metemos en el barrio todavía estamos ahí.. me despido de mi acompañante, el se va a otro hotel.
Al final, a las siete llego después de trece horas de autobús, pero no me coge de sorpresa, no me importa, además he visto el cambio de paisaje de Lumbini a Kathmandu, pueblitos, gente ... una gozada.
En el hotel, recomponer algo de la mochila, echar un vistazo a la cámara, pobrecita le digo, menudo "tute" te estoy dando.
Una enorme ducha caliente sobre todo para quitarme el polvo, otra gozada.
Sólo me queda ir a cenar con una cerveza fria y estupenda, y otra gozada !!! que más se puede pedir, bueno, si ... una cosa ...
Mañana veré a mi amigo, Udaya, nos contaremos cosas.

Agur.